En las ciudades no se cumplen medidas de aislamiento obligatorio.
En el país se han detenido a más de 33 mil personas, la mayoría en Lima y en las regiones de La Libertad, Loreto, Piura y Lambayeque.
La pandemia desnudó el débil y precario sistema de salud pública en el país, sobre todo en las regiones y el comportamiento (de algunos sectores de la población urbana) con su poca responsabilidad y solidaridad de la población en ciertas ciudades del país, las cifras así nos demuestran más de 33 mil detenidos por burlar la emergencia sanitaria que vive la humanidad.
NOSOTROS ASUMIMOS VIGILANCIA EN NUESTROS TERRITORIOS
Las comunidades indígenas de la Amazonía han dicho que se sienten desprotegidas, frente a esta situación, ellos mismos han asumido la vigilancia de sus territorios frente al posible ingreso del coronavirus a través de personas foráneas. Por ejemplo, el último jueves interceptaron en Madre de Dios una embarcación con bidones de combustible, insumo utilizado para la minería ilegal, una actividad que no se ha detenido pese a la pandemia.
El presidente de la Reserva Comunal Amarakaeri, Walter Quertehuari, que hace unos días un grupo de indígenas de San José de Karene cerraron un puente por donde transitaban madereros y mineros ilegales, a fin de evitar que ingresen a sus territorios. “El temor es bastante grande porque nosotros estamos desprotegidos, no tenemos puestos de salud implementados, y si llega el coronavirus será una tragedia para nuestros pueblos”, comentó.
El dirigente pidió el apoyo de las Fuerzas Armadas para vigilar los territorios comunales. “Nuestros hermanos están desprotegidos y las actividades ilícitas no han parado ni siquiera por el coronavirus. Imagínate qué pasaría si fuera un narco y les hubiera disparado a nuestros hermanos. En nuestras comunidades hemos cerrado los accesos, pero necesitamos la ayuda de las Fuerzas Armadas”, dijo Quertehuari. Por: Beto Cabrera M.