Todo parece que la herencia de Ollanta Humala y de otros gobiernos, en temas de conflictos sociales, va a explotar en cualquier momento a nivel nacional, sobre todo en Datem del Marañón, cuyos pueblos sufren hoy la terrible contaminación de sus tierras, agua y espacio con el derrame de petróleo y las consecuencias en la salud de la población que esto está acarreando.
Desde Andoas el alcalde del lugar Pepe Cisneros, informó vía su página de Facebook, que dos niños de 1.8 años y 3 años de edad, de la comunidad nativa Antonieta en el Río Huasaga, fallecieron con vómitos, diarrea y fiebres altas, por lo que está exigiendo a las autoridades competentes que se investigue y se aclaren estas muertes, antes de que más niños fallezcan.
Miembros de ORIAP (ORGANIZACIÓN INTERÉTNICA DEL ALTO PASTAZA), informaron también que en la comunidad nativa Alianza Capahuari, el pasado 30 de octubre fallecieron dos niños; y desde esa fecha, están convocando al Ministerio de Salud, que solo envió una delegación de médicos con calmantes y suero. “No llevaron reactivos para análisis y por lo tanto no han podido determinar cuál es el motivo de estas muertes”, señalan.
Las autoridades piden que se instale un laboratorio portátil en Andoas, para determinar las causas de las muertes.
Frente a estas realidades, las organizaciones de la sociedad civil entre mestizas e indígenas, agrupadas en torno al FREDEDAM (Frente de Defensa de Datem del Marañón), acordaron realizar un paro de 48 horas, los días 14 y 15 de noviembre.
La medida intenta también sensibilizar y presionar al Gobierno Central, para que brinde mejor atención a los pueblos de Datem, pues tienen una serie de necesidades por resolver según dijo el alcalde René Chávez en un medio local. (Roger Torres)