Hoy se cumplen siete años desde que se dio inicio a la obra Cachiyacu II, un proyecto destinado a mejorar el servicio de agua potable en las ciudades de Tarapoto y Morales. A pesar del tiempo transcurrido, la obra continúa inconclusa y sin un horizonte claro para su culminación, generando malestar en la población que esperaba una solución definitiva al problema del abastecimiento de agua.
Desde el inicio, el proyecto presentó deficiencias, especialmente en la construcción del reservorio, que fue cuestionado por su estructura. Aunque se realizaron pruebas con diamantina a través de universidades especializadas, el reservorio aún no puede ser utilizado, según denunció el presidente del Frente Cívico de Defensa de los Intereses de San Martín, Roger Heredia Núñez.
Heredia responsabilizó directamente a la Municipalidad Provincial de San Martín, a los representantes del Consorcio Cachiyacu y a la empresa Emapa San Martín por la situación actual de la obra. Afirmó que, a lo largo de los años, han solicitado en múltiples ocasiones la inspección técnica del proyecto, pero hasta la fecha no han recibido respuestas concretas ni avances significativos.
Además, Heredia señaló que algunos especialistas han recomendado incluso la demolición del reservorio y ser reconstruido nuevamente, debido a las graves fisuras detectadas en su estructura. Esta posibilidad refleja la magnitud del problema y la mala ejecución de una obra que debió estar al servicio de miles de ciudadanos.
Las autoridades competentes no han emitido informes claros ni brindado declaraciones recientes sobre el estado del proyecto. La población sigue a la espera de una solución real, mientras la promesa de agua potable de calidad para dos distritos continúa postergada sin fecha definida. Por: Hugo Anteparra