Después de un año de haberse publicado la Ordenanza regional que exige el uso de madera certificada en las obras públicas para el departamento de San Martín, el consejo regional que aprobó la norma, parece haber olvidado la reglamentación de esta ordenanza, la cual aún no entra en proceso de implementación porque hasta la fecha, ni un solo centímetro de madera usada en las obras de todas las instancias del Gobierno Regional han cumplido con ese requisito de tener la madera certificada por la Autoridad Regional Ambiental (ARA) del Gobierno regional.
La aprobación por unanimidad de la ordenanza regional N° 015-2013-GRS/CR, fue realizada el 04 de octubre del 2013, la misma que exige que todas las unidades ejecutoras, proyectos especiales, direcciones regionales y órganos desconcentrados del gobierno regional – y puesto en conocimiento de los gobiernos provinciales y distritales – que en las bases para las contrataciones y adquisiciones públicas donde estén incluidos productos forestales y de fauna silvestre, deben tener la certificación de origen expedida por la Autoridad Regional Ambiental (ARA).
En el artículo segundo de la ordenanza, se establece un plazo de 60 días para que se elabore y alcance al consejo regional un texto modificatorio al Texto Único de Procedimiento Administrativos (TUPA). El mismo plazo de 60 días rige también para que las unidades ejecutoras y administrativas proyecten las directivas que establecen el “certificado de origen” como requisito para la adquisición de recursos forestales y/o de fauna silvestre.
Ya paso más de un año y no hay nada. Hasta hoy día no está vigente esta ordenanza porque en el artículo cuatro se dispone la suspensión de los efectos de dicha ordenanza regional hasta la aprobación y promulgación del TUPA elaborado por el ARA. Esperamos que el gobierno entrante con su nuevo consejo regional ponga más énfasis en la implementación de sus propias propuestas.
