El sábado por la noche, los padres de familia de la Institución Educativa María Hidalgo Torres, ubicada en el distrito de Cuñumbuque, decidieron levantar la medida de fuerza que habían iniciado la semana pasada. Esta decisión se produjo tras la llegada de los 250 conectores eléctricos necesarios que faltan para la nueva infraestructura del plantel, lo que permitirá que los estudiantes vuelvan a utilizar las instalaciones y evitará que continúen recibiendo clases en ambientes prestados.
Los materiales llegaron a las cinco de la tarde del sábado, y, en respuesta, los manifestantes se reunieron con sus dirigentes para discutir el próximo paso. Finalmente, acordaron suspender la protesta que habían comenzado para exigir al alcalde Salomón Díaz Zavaleta la compra de los conectores faltantes. Estos materiales habían sido observados y requeridos por los especialistas de la Unidad de Gestión Educativa Local de Lamas durante una supervisión de la nueva infraestructura.
El incidente del viernes, cuando la Policía Nacional lanzó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, provocó la ausencia del alcalde en el distrito. En su lugar, fueron los funcionarios municipales quienes entregaron los conectores a los padres de familia, facilitando el levantamiento inmediato de la protesta y devolviendo la tranquilidad a la población.
Las autoridades han comprometido que, a más tardar el miércoles 14 de agosto, los 250 conectores eléctricos serán instalados y se levantarán algunas observaciones pendientes. Esto permitirá que los estudiantes ocupen la nueva infraestructura después de dos años de espera, devolviendo así la tranquilidad a los padres y docentes, quienes desde el año pasado han exigido la pronta entrega de la obra. (Hugo Anteparra)