Hola mis queridos lectores y amigos de miércoles como siempre es un día para reflexionar, empiezo a molestarme e incomodarme en base a las escenas de nuestros dirigentes provinciales y distritales aun regionales del flamante SUTEP. La historia de las huelgas en esta agremiación se inicia el 15 de enero de 1919, el Perú se convirtió en uno de los primeros países en establecer la jornada laboral de ocho horas diarias. Este hecho nos colocó en los ojos del mundo; sin embargo, tiene una agitada historia detrás.
Según Antonio Zapata, investigador principal del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), ese fue el gran logro de una de las mayores huelgas que ha visto el país. No obstante, existen otras protestas que también han destacado por sus logros.
Así, Zapata recordó la manifestación del 19 de julio de 1977, la que no solo abarcó Lima, sino que implicó un día de paro nacional.
El historiador explica que se trató de una huelga en contra del alza en el costo de vida, los despidos masivos y los denominados ‘paquetazos’, que eran medidas económicas que perjudicaban mayormente a los trabajadores. Pero hoy recuerdo con mucho orgullo la huelga del (Sutep) del año 1077 y 78, aún tenía 8 años de vida ese recuerdo que llevo dentro de nostalgias y tristezas, aquellos maestros profundizaban su lucha con mítines en las plazas desfilaban por las calles con cartelones, más aun estos maestros de antaño llevaban a su hijos a desfilar como una identificación de esa agremiación.
Podemos recordar En 1978, el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) inició una huelga indefinida que duró tres meses y 15 días. Esta manifestación se convirtió en la más larga reportada en el Perú hasta el momento. “Fue convocada para reclamar derechos y reconocimientos de la profesión docente, una remuneración justa, entre otros”, A todo ello este recuerdo de las huelgas y paros que fueron trascendentales en la lucha del Perú. Nos preguntamos hoy ¿Por qué los paros y huelgas fracasan? Podemos identificar hoy y cada vez que se realiza un paro y huelga nuestros docentes en vez de asumir esa responsabilidad de lucha por reivindicación laboral se esconden en la casa y se olvidan de salir a las calles y dolencia de los dirigentes interesados muchos de ellos mantenidos por el mismo gremio sin identificarse de la agremiación que sólo es dirigente por vocación.
Estas escenas débiles sin identificación de agremiación ha perdido espacio el (Sutep) además de los dirigentes interesados para poder asumir intereses personales como buscar un espacio en los contratos de algún familiar, además de buscar estrategias de poder hacer una reasignación y adoleciendo la institucionalidad de dirigentes como destacarse y buscar una institución educativa más cercana. El colmo de algunos dirigentes que vendieron huelgas por la reivindicación de loa maestros en forma silenciosa igual que lacayos se acercaron a la llamada “patronal” para buscar espacios y dedicarse como simples sobones acercarse y arrastrarse tan rápido para ceder en las huelgas y paros.
Es vergonzoso observar los paros y huelgas del (Sutep) sin credibilidad por lo que tenemos dirigentes sin credibilidad como los provinciales y regionales sin escuela sindical para entender desde adentro la historia del Sutep. Entonces no podemos echar la culpa a los gobiernos que nos han dejado ilesos son los dirigentes caraduras del (Sutep) que se ubica en la Burocracia por ejemplo en la institucionalidad de la derrama magisterial el alquiler del grupo rojo la división del CONARE, enfrentamientos de maestros y dirigentes.
Es hora de levantar y derrochar a los dirigentes enquistados de la cúpula politizada. Los maestros necesitamos respeto y consideración proponen sus reclamos sin haber dado una bajada e base como se hacía hace muchos años, es que la desinformación para los que someten aquellos dirigentes que solo buscan intereses personales y familiares.
Es nuestra reflexión hasta pronto.