
En conferencia de prensa, Pedro Bogarín, candidato a la Presidencia del Gobierno Regional de San Martín y Adolfo Bedoya, secretario general del Partido Aprista Peruano, denunciaron que Miguel Santillana, el personaje del “barómetro anticorrupción”, es un promotor minero que llegó a Tarapoto, no por casualidad, sino para potenciar la minería y apoyar presuntamente al candidato fujimorista, Víctor Noriega, y que el barómetro anticorrupción es puro cuento.
Presentó documentos y videos donde aparece Miguel Santillana como promotor y consultor minero y ocupándose de casos de empresas explotadoras de minerales en el país. Llegó a Tarapoto aparentemente para buscar corrupción de los candidatos que van a la segunda vuelta; sin embargo, solo anunció que lo haría con Pedro Bogarín en el denominado “barómetro anticorrupción” y no así de Noriega, por lo que dijeron vino para defender la página 34 del plan de gobierno del candidato fujimorista.
Miguel Santillana, es representante del Instituto del Perú y tiene experiencia como consultor de diversas instituciones de desarrollo y empresas privadas, ha trabajado como investigador en minería y relaciones comunidad-empresa, en políticas de desarrollo rural, escribió columnas de opinión y varios libros como Cajamarca competitiva, así como conferencista de temas relacionados a la minería informal: Caso del río Ramis, quinto aniversario del Convenio Marco Tintaya, gasto del canon minero en Ancash y se muestra como promotor de la minería.
Bogarín, asentó que Noriega y su entorno más cercano están haciendo una jugada negra al traer aparentemente a un personaje de Lima para buscar derribar su candidatura haciendo ver que es corrupto, por ello dijo que “Noriega nunca se arrepintió de su plan de gobierno con respecto a la explotación minera y petrolera en la región, por el contrario sigue con ello y es por eso que trae a una persona que conoce mucho de minería y de tratos con empresas para seguir su dirección o en todo caso obedecer los intereses de otros”.
Por su lado, Miguel Santillana, aceptó ser un consultor minero y defensor de las empresas dedicadas a este rubro, negó la acusación y dijo que no conoce a Noriega y que no es fujimorista, que no pretende tal situación simplemente pasar el “barómetro anticorrupción” a Pedro Bogarín.