La fundadora de “Corazón Serrano”, Edita Guerrero, ahora es atribuída con dotes de “santa”.
Y es que en su natal Piura, los lugareños visitan su tumba pidiéndole milagros, entre traer niños saludables al mundo o salvar a personas que padecen enfermedades incurables, los mismos que afirme ha cumplido sin falta.
Las fotografías de Edita Guerrero ahora tienen velas prendidas y más de uno ya acude a rezarle, atribuyéndole cierta divinidad.