La noche del último viernes, el presidente regional, Víctor Noriega Reátegui, llegó a la localidad de Chazuta para entregar ayuda humanitaria a las decenas de familias afectadas por la crecida del río Huallaga, específicamente a los damnificados de las comunidades Tununtunumba y Canayo.
Bajo una persistente lluvia, la autoridad llegó a las siete de la noche a la plaza del pueblo encabezando una caravana de vehículos con víveres, colchones, camas, vestimenta, carpas, entre otros enseres. A la multitud que lo esperó en las inmediaciones del local municipal, les llevó su mensaje de solidaridad y apoyo en estos difíciles momentos que atraviesan, muchas de ellas con la pérdida de sus viviendas y animales domésticos.
“Ante cualquier inclemencia del tiempo debemos responder inmediatamente, en coordinación con las autoridades nacionales, regionales y locales. Unidos fortalecemos esfuerzos”, les dijo a las mujeres y niños que formaron fila para recibir la ayuda.
Noriega informó que estuvo en Lima para buscar mayor apoyo para los pueblos aquejados por las lluvias y la creciente de los ríos y quebradas. En el caso de Tununtunumba, indicó que los pobladores están de acuerdo en reubicarse a una zona más segura. Esta comunidad asentada al margen izquierdo del río Huallaga, sufrió la inundación de casi la totalidad de las viviendas.
En su mensaje a la población, se refirió a las necesidades prioritarias de Chazuta, como un centro de salud equipado y vías de acceso a los pueblos. También señaló que Chazuta al ser considerado como patrimonio cultural de la nación, debe contar con un museo de sitio para revalorar lo que nuestros ancestros han dejado. “No perdamos la confianza de que vamos a lograr lo que Chazuta necesita”, sentenció Noriega Reátegui.
La máxima autoridad de San Martín repartió simbólicamente sacos con víveres a un grupo de personas en el interior del municipio y sostuvo una reunión de coordinación con las autoridades locales.