El director de la Institución Educativa Miguel Chuquisengo Ramírez de Tarapoto, profesor Marco Antonio Revilla Asto, expresó su preocupación ante el próximo inicio de la obra de mejoramiento del jirón Martínez de Compagñon. Según indicó, la falta de veredas y el hecho de contar con una única puerta de acceso podrían generar serios inconvenientes para el ingreso y salida de los estudiantes y docentes.
Los trabajos de asfaltado y construcción de cunetas, a cargo del Gobierno Regional de San Martín, ya comenzaron. No obstante, hasta el momento, las autoridades educativas no han recibido información sobre cómo se garantizará el acceso a la institución una vez que la calle sea cerrada. Ante esta incertidumbre, solicitarán una reunión con los responsables del Proyecto Especial Huallaga Central y Bajo Mayo para exponer su preocupación y buscar soluciones.
Actualmente, la institución educativa no cuenta con veredas, ya que el zanjón que atraviesa la calle ha erosionado los bordes, impidiendo el tránsito peatonal seguro. Esta situación podría agravarse cuando inicien las obras en la cuadra once del jirón Martínez de Compagñon, afectando a casi 500 estudiantes que diariamente asisten al colegio.
Ante este panorama, los padres de familia y docentes también han manifestado su inquietud, ya que el acceso restringido podría poner en riesgo la seguridad de los alumnos. Se espera que las autoridades correspondientes tomen en cuenta esta problemática y presenten una alternativa viable antes de que la obra avance.
Por otro lado, el director Revilla Asto anunció que, a pesar de las dificultades, vienen realizando mejoras en la infraestructura del plantel con los limitados recursos asignados por el Ministerio de Educación. Su objetivo es garantizar que el colegio esté en óptimas condiciones para el inicio del año escolar 2025. Por Hugo Anteparra