En el marco de la CADE 2023, una delegación de presidentes de cámaras de comercio de 15 regiones del norte, centro, sur y de la Amazonía, se reunieron con el segundo vicepresidente de la CONFIEP, Álvaro Correa, y directivos de los gremios asociados a la CONFIEP, así como ejecutivos de empresas, para compartir una posición sobre la situación económica que atraviesa el país, además de alcanzar propuestas de reactivación.
DECLARACIÓN
Declaración de Urubamba por la reactivación y el cierre de brechas
Los presidentes de las Cámaras de Comercio de 15 regiones del país, reunidos en Urubamba, considerando la recesión y la crítica situación en que se encuentran las empresas formales, que son las que generan empleo, y frente a la urgente necesidad de reactivar la economía nacional para atender a los 10 millones de peruanos que se ubicarían por debajo de la línea de pobreza en el 2023, nos comprometemos a:
1. Solicitar al Gobierno que asuma su responsabilidad de actuar urgentemente e implementar el plan de reactivación, generando un shock de confianza que deje de lado medidas de corte populista como la agenda 19 (laboral) y la aventura empresarial del Estado (caso Petroperú).
2. Elevar propuestas para impulsar los motores de la economía del Perú. Por ejemplo: reducir la perisología para las actividades minero energéticas, el regreso a la ley de promoción agraria, brindar sostenibilidad al Fondo Mi Vivienda, dialogar sobre los mecanismos de reactivación sectorial del turismo y la pesca, y terminar con los excesos de organismos como la OEFA, SUNAFIL, OSINERGMIN y otros que afectan a la actividad empresarial formal.
3. Impulsar una verdadera colaboración entre todos los sectores para destrabar los proyectos de infraestructura, irrigación y seguridad energética paralizados. A la vez, se requiere actuar con sentido de urgencia para impulsar proyectos importantes en la infraestructura vial, fluvial y vías de acceso a los aeropuertos con una gestión adecuada por parte del sector privado.
4. Trabajar junto con las autoridades para implementar el silencio administrativo positivo en todas las instituciones del Estado y revisar las normas irracionales por las que tiene que transitar la micro y pequeña empresa, las cuales no les permiten operar y crecer en la formalidad; ocasionando, en particular, el cierre de sus establecimientos y la imposición de multas.
5. Alzar la voz para lograr una estrategia transversal y efectiva que haga frente a la violencia generada por la criminalidad y las actividades ilegales que afectan a las familias y a las empresas. Los robos y las extorsiones vulneran los derechos humanos de los peruanos a la vida, la libertad para trabajar y emprender, y la seguridad.
El Perú requiere que sus autoridades brinden estabilidad política, seguridad jurídica, paz social, confianza, estado de derecho y, sobre todo, que cumplan su labor con integridad. Las Cámaras de Comercio Regionales asumimos el compromiso de impulsar la presente “Declaración de Urubamba”, renovando nuestra fe en el presente y el futuro de nuestra Patria.