San Martín promueve la meliponicultura como una alternativa productiva y ecológica, fomentando el uso de nidos temporales para atraer abejas nativas sin afectar el entorno natural.
El desarrollo sostenible no se impulsa únicamente a través de la apicultura. Una actividad que viene cobrando fuerza en la región es la meliponicultura, dedicada a la crianza de abejas nativas sin aguijón. El Gobierno Regional de San Martín, a través del “Proyecto Apícola” que ejecuta la Dirección Regional de la Producción, viene promoviendo esta práctica en diversas zonas del departamento.
Como parte de esta iniciativa, el equipo técnico del proyecto visitó recientemente al meliponicultor beneficiario Casimiro Córdova, del sector Selva Alegre, ubicado en el distrito de Soritor, provincia de Moyobamba. Durante esta jornada de acompañamiento, se brindó asistencia técnica especializada en la elaboración y colocación de nidos temporales, una técnica eficiente y respetuosa con el medio ambiente que permite atraer enjambres de abejas nativas y formar nuevas colmenas.
La técnica consiste en preparar un cebo atrayente con cera, propóleo e involucro disueltos en alcohol, que se aplica en envases reciclados. Estos se acondicionan con una piquera y se recubren con plástico negro, creando un entorno ideal para atraer abejas nativas sin aguijón y facilitar la formación de nuevas colmenas.
La técnica de nidos temporales permite captar nuevas colmenas sin dañar el entorno natural, evitando la tala de árboles. Su efectividad es mayor en verano, cuando las abejas liberan princesas para formar nuevas colonias. Como parte de esta técnica, luego de aproximadamente dos meses y con el enjambre ya capturado, se realiza el trasiego a cajas tecnificadas, donde las abejas nativas inician su proceso de producción de miel.
Esta miel puede transformarse en diversos derivados con alto valor comercial y medicinal. Además, la meliponicultura no solo representa una alternativa productiva para las familias, sino que también contribuye activamente a la conservación de los bosques, al mantenimiento de la biodiversidad y a la preservación de la flora apícola de la región.