Son miles los venezolanos que migran al país. Así, en el segundo quinquenio del ochenta, miles de personas también migraron a Venezuela. ¿Por qué migran las personas a otros países? Así como el ochenta, el Presidente hablaba como loro, que según él estaba haciendo actos históricos y revolucionarios, claro, con la más alta inflación de la historia, con profunda devaluación monetaria, llevando al país a ser inelegible a nivel mundial; así ahora, el de Venezuela, habla sin parar, como si fuera el dueño de la razón, encasillado en su soberbia y demencia. ¿Por qué será éstos individuos que hablan de socialismo, primero, no quieren dejar el poder, segundo, a su pueblo le conducen a la extrema pobreza? Las personas migran porque en su país de origen la situación social y económica es desastrosa.
Los migrantes ya están en casa, hay que tratarlos bien, como uno quisiera que se nos traten cuando migramos a otro país. Pero, en las redes sociales, se observan los maltratos que algunos jovencitos migrantes hacen a los nacionales, primero provocando peleas callejeras, luego insultándoles que son feos porque son indígenas. El hecho que se les abra los corazones y las puertas del país, para desarrollar sus vidas en estos tiempos difíciles, no significa que van a venir como avalancha contra los nacionales a agredirles e insultarles. Hay que mostrar respeto a la casa que nos cobija. Algo así cuando uno va de visita a una casa, pues uno tiene que adaptarse a las reglas de esa casa; y no se va pretender imponer nuestras costumbres en casa ajena.
¿Cómo es que los nacionales se les deberían a los migrantes por el inmenso favor que nos harán al mejorar nuestra raza? Quizá son palabras de jovencitas con limitado acervo cultural, por tanto hay que tomarlo sabiendo de quien viene. El país es pluricultural, porque aquí se convive con diferentes razas humanas, desde las africanas, chinas, japonesas, norteamericanas, inglesas, alemanas, mejicanas, españolas, portuguesas. Existen mestizajes de ellas entre sí, también con las nativas que son más de treinta. Entre las indígenas están la inca cuzqueña, la quechua ayacuchana, la quechua huancavelicana, la quechua lamista, los pocras, los jaujas, entre otras. Aquí no se puede hablar solo de raza indígena; aunque si lo fuera, como los incas hasta Huáscar, quién no saltaría de orgullo por pertenecer a tan magnánimo imperio organizacional, cuya sociedad era manejada solo con tres normas: no robar, no ser haragán y no ser mentiroso. Cuánta diferencia con la actualidad, donde tenemos cerros de normas que no se cumplen y donde las principales autoridades están embarradas con la corrupción de robos, son mentirosas como alas de mariposas. Es que, la inerme criatura que habla semejantes barbaridades, desconoce las grandezas de las razas que nos resaltan de orgullo. Pero, “está ampliamente reconocido el poblamiento de América desde Siberia, ya que durante la edad de hielo, América y Asia se encontraban unidas a través de un gran puente llamado Beringia. La evidencia genética refuerza esta tesis, pues relaciona los nativos americanos con los pueblos indígenas de Siberia. La llegada de los primeros pobladores al continente americano, unos dicen entre 12 000 o hasta 60 000 años; otros 19 000 años y otro basado en la posibilidad del origen de A2 (ADN) en Alaska, le da 17 000 años a la colonización de América desde Siberia. El Proyecto Genográfico afirma que se produjo entre hace 15 000 y 20 000 años”.
Alguien dijo que en su país de origen, su gobierno socialista no les enseña a trabajar, solo implanta becas por acá, becas por allá, programa social de dinero en efectivo porque tiene 35 años, dinero porque tiene hijos gemelos, dinero porque tiene marido, dinero porque hace estudiar a su hijo en la escuela, alimentos a los jardineros, alimentos a los escolares, en fin, siempre pensando en dar lo que no es suyo, siempre pensando en dar el pescado sin enseñarles a pescar, ¿qué se está formando? ¿Futuros ciudadanos inútiles, haraganes?
¿Cómo es que la apariencia física de los indígenas no es la mejor? Sería buena que la persona que tiene lengua bípeda muy ligera, se dé una vuelta por la selva y por la sierra, y verá la real belleza femenina, la que se mimetiza con firmeza con el paisaje natural del bosque, del río, del nevado y de las frescas cascadas. Ni decir de la sincronía existente entre los pétalos rojos de las rosas con sus agradables labios rojos; de su tersa cabellera que flamea con la brisa vespertina haciéndola cada vez más bella. No, no es que se mejorará la raza, simplemente hay que admirar las bellezas de razas laboriosas que forjaron una próspera patria, que recibe a migrantes y turistas con los corazones y brazos muy abiertos, porque el Tahuantinsuyo ha tenido lo suyo, en base a tesón, trabajo y una muy buena organización política social. En esta tierra de mestizos y nativos, todos se unen para hablar un solo lenguaje del progreso, aun existiendo malos administradores y políticos, que no ponen en práctica los principios incas. Por tal razón, se pide respeto a la casa que nos cobija.