24.8 C
Tarapoto
sábado, abril 5, 2025
spot_img

San Martín en cifras: Último reporte de los Indicadores Nacionales en 2024

La región ha demostrado progresos, superando en algunos aspectos el promedio nacional. No obstante, la lucha contra la anemia infantil y mejorar la nutrición siguen siendo prioridad.

San Martín ha mostrado avances significativos en diversos indicadores de desarrollo, según los datos recientes de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES) 2024. San Martín destaca en varias áreas del desarrollo social y económico. Algunos de los principales indicadores incluyen:

Cobertura de vacunación infantil: La región alcanzó un 85% de cobertura, situándose por encima del promedio nacional del 80%.

Desnutrición crónica infantil: Se registró una reducción al 17%, mientras que la media nacional es del 19%.

Acceso a servicios de salud materna: El 92% de las gestantes en San Martín tuvo al menos cuatro controles prenatales, comparado con el 90% a nivel nacional.

Tasa de anemia en niños menores de 5 años: A pesar de los esfuerzos, el 35% de los niños en la región continúa con diagnóstico de anemia, frente al 33% en el promedio nacional.

En el contexto nacional, San Martín ocupa una posición intermedia en indicadores de salud y bienestar, con avances en vacunación y atención materna, pero con retos pendientes en la reducción de la anemia infantil.

Los programas presupuestales han focalizado estrategias para mejorar estos resultados, especialmente en zonas rurales donde las brechas de acceso a servicios básicos siguen siendo un desafío.

El acceso al agua potable es fundamental para reducir la pobreza, ya que es esencial para la salud, la educación, y el desarrollo económico.

Factores que afectan la anemia infantil

La anemia infantil es un problema de salud pública y puede ser causada por múltiples factores, como el bajo consumo de alimentos ricos en hierro como carnes rojas, hígado, pescado, menestras y verduras de hoja verde, es decir, dietas basadas en carbohidratos y bajos niveles de micronutrientes esenciales.

Deficiente absorción de hierro: Alto consumo de té, café o leche de vaca en menores de edad, lo que interfiere en la absorción del hierro, además de la falta de vitamina C en la dieta, la cual ayuda a la absorción del hierro.

Infecciones recurrentes: Enfermedades como parásitos intestinales, infecciones respiratorias agudas y enfermedades diarreicas aumentan la prevalencia de anemia.

Falta de acceso a agua potable y saneamiento básico: El consumo de agua no tratada aumenta el riesgo de enfermedades que pueden afectar la absorción de nutrientes.

Factores socioeconómicos: Pobreza y dificultades económicas que limitan el acceso a una dieta balanceada, sumar a ello el bajo nivel educativo de los padres, lo que impacta en el conocimiento sobre la alimentación saludable.

Según la Organización Mundial de Salud, la lactancia natural exclusiva durante los seis primeros meses de vida reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios sanitarios que llegan hasta la edad adulta. Junto con Unicef recomienda que se inicie en la primera hora de vida con la frecuencia que quiera el lactante y que no se utilice biberones, tetinas ni chupetes.

Implementar acciones para reducir la anemia infantil

Promoción de la lactancia materna exclusiva: Incentivar la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses y complementaria hasta los 2 años. Mejorar la alimentación infantil, incorporar alimentos ricos en hierro en la dieta de los niños (sangrecita, hígado, pescado, menestras), es necesario fortalecer la educación nutricional para las familias.

Mejorar el acceso a agua potable y saneamiento, por ello es un factor clave asegurar acceso a agua segura y saneamiento básico en comunidades rurales y urbanas marginales.

Control y seguimiento de la salud infantil: Asegurar controles periódicos de crecimiento y desarrollo (CRED), realizar pruebas de hemoglobina para la detección temprana de anemia y su tratamiento.

Programas de educación y comunicación: Campañas de sensibilización sobre la importancia de la prevención de la anemia.

Capacitación a padres y cuidadores en prácticas adecuadas de alimentación y salud en las escuelas los alimentos entregados no son ricos en hierro o no están bien balanceados.

Durante el embarazo, madres e hijos lo comparten todo, incluso los anticuerpos que se crean tras vacunarse contra el tétanos, la tos ferina y la difteria, y contra la influenza.

Los datos del Informe ENDES 2024 indican que la prevalencia de anemia infantil sigue siendo alta (35.3% según la nueva directriz de la OMS), lo que sugiere que los programas actuales deben fortalecerse para ser más efectivos en la lucha contra la anemia.

Los programas de alimentación escolar son un factor clave para combatir la anemia infantil, pero deben mejorar en calidad nutricional y cobertura. Es fundamental complementar estas estrategias con educación nutricional, acceso a servicios de salud y saneamiento básico para lograr resultados sostenibles en la reducción de la anemia.

San Martín ha demostrado progresos en ámbitos puntuales, superando en algunos aspectos el promedio nacional. No obstante, la lucha contra la anemia infantil y la mejora en nutrición siguen siendo prioridades. Para los próximos años, se espera que el refuerzo de los programas sociales y de salud continúe cerrando las brechas existentes. 

Artículos relacionados

Mantente conectado

34,603FansMe gusta
433SeguidoresSeguir
1,851SeguidoresSeguir

ÚLTIMOS ARTÍCULOS