Más de 300 árboles de especies nativas fueron plantados en la comunidad nativa de Chumbaquihui, ubicada en el distrito de Pinto Recodo, provincia de Lamas, región San Martín, durante una jornada de reforestación realizada el lunes 26 de mayo. La actividad contó con la participación de decenas de voluntarios y ciudadanos comprometidos con la conservación ambiental, quienes se unieron con el objetivo de recuperar áreas degradadas y fortalecer los ecosistemas locales.
La iniciativa fue impulsada por la Autoridad Regional Ambiental (ARA) del Gobierno Regional de San Martín, en coordinación con la Municipalidad Distrital de Pinto Recodo, la comunidad nativa de Chumbaquihui, el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) y empresas privadas como Sachabes, Grupo Inca y Vivehg Tarapoto, que sumaron esfuerzos en esta importante labor ambiental.
Durante la jornada, se plantaron especies nativas como capirona, quillosisa y cedro, utilizando abono para favorecer su desarrollo y crecimiento. La reforestación se llevó a cabo en zonas colectivas de la comunidad, centros educativos y la faja marginal de la quebrada Chumbaquihui.
Erick Pinchi Pinchi, representante de la Dirección de Gestión Forestal y Fauna Silvestre de la ARA, exhortó a la ciudadanía a mantener y renovar el compromiso con la protección del medio ambiente, e hizo un llamado a evitar prácticas nocivas como la quema de rastrojos agrícolas, que generan daños irreparables en los ecosistemas.
“La reforestación es un proceso vital para revertir los efectos de la deforestación y la degradación de los bosques. Frente al impacto de las actividades humanas, constituye una solución clave para restaurar la funcionalidad y biodiversidad de los ecosistemas forestales”, afirmó Pinchi.
El especialista también subrayó que la reforestación es una respuesta directa a los desafíos ambientales actuales, en un contexto donde los bosques –considerados el pulmón verde del planeta– enfrentan una intensa presión por la tala ilegal, la expansión agrícola, la minería, el desarrollo de infraestructura y los incendios forestales.
La deforestación en San Martín es un problema crítico, que amenaza la biodiversidad, la seguridad hídrica, la resiliencia frente al cambio climático y la identidad cultural de las comunidades nativas. Ante ello, la reforestación no solo es necesaria, sino urgente.
Según datos de Global Forest Watch, entre 2002 y 2023 el Perú perdió 2.62 millones de hectáreas de bosque primario, lo que representa aproximadamente el 66% de la pérdida total de cobertura forestal en ese período. Estas cifras reflejan la magnitud del reto ambiental que enfrenta el país.