En otras regiones autoridades gestionan y capacitan a brigadistas, en nuestra región parece que esperamos que se inice el fuego.
Esta nota busca alertar sobre la importancia de que la región también reciba apoyo y capacitación para prevenir incendios, especialmente considerando la experiencia difícil que han enfrentado agricultores y el impacto en nuestra riqueza natural.
En San Martín, parece que no aprehendemos de los desastres naturales, los especialistas han advertido que se nos avecina un fuerte estrés hídrico, el agua para consumo humano escasear impactando en los hogares de nuestra comunidad, todo indica que los incendios forestales van a golpear otra vez los sembríos, la biodiversidad se verá afectada.
Mientras tanto, en otras regiones SERFOR capacita brigadistas contra incendios
En otras regiones ya se está trabajando, se sabe que SERFOR fortalece capacidades de municipios de Puno en la formación de brigadistas para la prevención de incendios forestales. Treinta funcionarios de los distritos con mayor incidencia de estos siniestros, Ayaviri, Sandia y Coasa, fueron capacitados para reforzar las acciones de prevención a nivel local.
Estas capacitaciones buscan formar brigadistas municipales que contribuyan activamente a las acciones de prevención mediante el conocimiento de los principios básicos del fuego, técnicas de manejo, identificación de factores de riesgo y planificación de medidas preventivas, en articulación con las autoridades competentes y en el marco de la gestión del riesgo de desastres.
“La formación de brigadistas municipales fortalece las capacidades de los gobiernos locales como primeras entidades de respuesta, dotándolas de técnicas para actuar oportunamente en la prevención de incendios forestales.”
Serfor continúa implementando y capacitando estos cursos contribuyendo a una gestión preventiva, integral y articulada del riesgo; mientras tanto en San Martín parece que vamos ha esperar que el agua no llegue a los hogares y el fuego devore las plantaciones agrícolas, nuestros ganados muera por falta de agua.
Estamos advertidos, de seguir con los brazos cruzados no habrá avión que sofoque incendios ni calme la sed de niños y abuelos.