Juez del Tribunal Superior Electoral de República Dominicana
Pedro Pablo Yermenos considera que este tipo de acciones entorpecen la labor de los órganos electorales y llevan a confusión a los votantes en todos los países.
Sus declaraciones se producen en el marco de la campaña iniciada por el JNE para promover una red de “Aliados contra la Desinformación” que visibiliza la labor de los organismos electorales en la lucha contra este mal.
El juez titular del Tribunal Superior Electoral (TSE) de República Dominicana, Pedro Pablo Yermenos, se mostró a favor de penalizar con mayor severidad y rigidez las acciones de desinformación electoral que se presentan en diversos países porque, en su opinión, entorpecen la labor de los órganos electorales y llevan a confusión a los votantes.
El magistrado señaló que su país no está exento de la proliferación de noticias inexactas o falsas, situación que se ha presentado en la región y el mundo a fin de sembrar dudas y cuestionamientos en los procesos electorales.
Consideró que las campañas de desinformación perjudican a la democracia, ya que llevan al desasosiego a la población, por cuanto la ciudadanía se preocupa y piensa que las cosas, en este aspecto, van a resultar mal.
Al respecto, afirmó que la mejor herramienta para combatir la desinformación es una profusa campaña de información para que los electores y toda la ciudadanía esté bien edificada sobre las características esenciales del proceso electoral.
«Un voto, en la medida que se emite con mayores niveles de información, sobre todo de una correcta información, es un voto mucho más consolidado y con mayor legitimidad», aseveró.
Al explicar los mecanismos de penalización de la desinformación electoral en su país, el juez dominicano recordó que en las Elecciones Ordinarias Generales Municipales de 2020 afrontaron una situación complicada en las que los comicios tuvieron que ser suspendidos.
En aquella ocasión, recordó, las redes sociales jugaron un papel preponderante en las campañas de desinformación, a las que calificó de “destructivas y maliciosas”.
“Afortunadamente, la República Dominicana pudo superar ese trauma terrible, que tuvo un gran impacto en la sociedad porque era la primera vez que se suspendían unas elecciones después de haberse iniciado”, acotó.