Lucero Guillén Cornejo, coordinadora de la Pastoral de la Tierra del Vicariato Apostólico de Yurimaguas, advirtió que los pueblos indígenas deben ser respetados en sus derechos.
En Balsapuerto se realizó ayer una reunión de socialización del proyecto “Creación del servicio de transitabilidad vial interurbana en la ruta Balsapuerto – Moyobamba”, actualmente en su etapa de preinversión.
“Muchas autoridades y líderes comunales piensan solo en que se haga la carretera y punto. Otros más conscientes, que saben que los pueblos indígenas tienen derechos, están exigiendo la consulta previa y el estudio de impacto ambiental”, señaló de manera enfática Lucero Guillén Cornejo.
La coordinadora de la Pastoral de la Tierra, quien promueve la asociatividad comunitaria en actividades agrícolas, expresó su preocupación al ver que instituciones del Estado y, sobre todo, la Municipalidad de Balsapuerto, no hagan prevalecer los derechos de las comunidades indígenas, pese a ser el distrito con mayor población originaria. “Los proyectos no deben saltarse las normas”, remarcó.
Agregó además que el proyecto de carretera a Moyobamba se superpone a áreas reconocidas en la Ordenanza Regional N° 025-2016-GRL-CR, que aprueba los Sitios Prioritarios para la Conservación de la Diversidad Biológica de Loreto. En este sentido, destacó que el territorio de Balsapuerto constituye una zona estratégica para la región.
“Tratar de que la gente diga sí solo porque se emociona no es nada bueno”, advirtió. “Las instituciones del Estado tienen que ser responsables, porque si hoy se saltan las normas, más adelante lo continuarán y eso es una mala señal”, sentenció.
Finalmente, Guillén insistió en que los pueblos indígenas deben ser respetados en sus derechos y recordó que el cumplimiento de la ley y la consulta previa son pasos indispensables para garantizar un desarrollo sostenible y justo.



