Sería injusto no reconocerle al alcalde Walter Grundel Jiménez que su política de asfaltar las calles de la ciudad son un logro que está abonando a la calidad de vida de los ciudadanos. Desgraciadamente, no se encuentra en su jurisdicción el sector del Coliseo Cerrado de Morales que se viene asfaltando desde la gestión de Linder Arévalo, pero que no se ha comenzado aún; con perdón por la ironía. Es cierto que Carlos Pilco Balvín ofreció asfaltar el sector, pero parece que no está dentro de sus prioridades. Vamos a insistir, porque Carlos Pilco por lo menos nos recibe para darnos siquiera ´un antaljinazo´, como dicen los vecinos. Sin embargo, seguimos confiando en Carlitos.
Muchos ciudadanos creemos que el señor Grundel no estaría recibiendo los asesoramientos adecuados. Parecería que la gente de su entorno no le ha recordado que las calles son para los peatones, y los vehículos; en ese orden. Por eso mismo, las calles deben tener su larga fila de árboles y arbustos para que oxigenen la ciudad, y sean esos espacios de verdor ya que está demostrado que ni el alcalde, ni los regidores, ni sus funcionarios van a permitir que tengamos un parque central para la felicidad de todos los ciudadanos. ¡Y vaya que ya necesitamos un parque!, porque el de Suchiche no es suficiente.
En una crónica especial le rendiremos un homenaje a Federico Luna Sangama. Los tarapotinos de estos últimos años no saben nada de él, que fue uno de los íconos de esta sociedad tarapotina que ha vivido desde su creación como pueblo un frenesí de crecimiento. Y desde la década de los cincuenta, don Federico cumplía con su trabajo que solamente los hombres trejos y fuertes podían hacerlo. Todo ello al compás de las ondas de Radio Tropical cuando la población escuchaba Los Sabanales, de Los Corraleros de Majagual, a Los Pacharacos, y quienes ya nos habíamos templado, como la mandolina de mi tío Jorge Mestanza, las canciones de Leo Dan. Mientras escuchaba esta música, don Federico subía la segunda cuadra del jirón San Martín llevando a cuestas una refrigeradora Electrolux, o una tremenda radiola Philips, comprada en Juan Pablo Mori. No era trabajo para sheplecos.
Critico que no haya políticas para crear una identidad de esta ciudad. Por ejemplo, en el tema del agua, no vemos aún propósitos serios para evitar que nuestras cuencas vayan desapareciendo. Tenemos agua por todas partes, pero los vecinos viven a salto de mata por la deficiencia de este servicio. Hablando de manera general, ya nos hemos cansado que en los talleres nos llenen de cuadros y diapositivas para hacer loas de sus “logros” cuando no vemos acciones concretas y solo formalidades….Pero están cumpliendo sus metas, dicen. Ya no se ha hablado de la interesante propuesta de Santiago Contreras Medina. Estoy casi seguro que, ahora –como dicen que ya dejó el sector Agricultura—habrá poco entusiasmo en desarrollar su propuesta. Porque nuestra ´cultura´ es hacer desaparecer, opacar y ningunear las iniciativas ajenas.
Si no se ningunean las iniciativas ajenas, le cambian de nombre o de sentido. De todos modos, te han desaparecido.., Por eso -como suele decirse– estamos como estamos.