Alianza Lima inicia una nueva etapa deportiva con la llegada del técnico argentino Pablo Guede, quien asume el reto de devolver al club victoriano a la pelea por el título de la Liga1 y avanzar en las rondas preliminares de la Copa Libertadores. Desde sus primeros contactos con el plantel, el estratega dejó en claro que uno de los pilares de su gestión será la disciplina, un mensaje que fue confirmado por Carlos Zambrano, referente y uno de los capitanes del equipo íntimo.
El defensor central reveló que sostuvo conversaciones iniciales con Guede apenas arribó a Lima y que el entrenador fue directo al momento de marcar la línea de trabajo. “Ni bien llegó a Lima hablé con él unos minutos, después ya nos encontramos personalmente junto a unos compañeros. Nos puso los puntos claros, qué es lo que quería para el grupo; ya sabía todo el puterío que había pasado y nos lo dejó claro. No es que se meta en la vida privada, pero esos errores extrafutbolísticos no los va a permitir”, declaró Zambrano, evidenciando la postura firme del nuevo comando técnico.
Las palabras del ‘Káiser’ reflejan un mea culpa dentro del plantel tras una temporada en la que Alianza Lima no logró cumplir sus objetivos en el torneo local. En ese sentido, Zambrano sostuvo que el grupo ha asumido el compromiso de dejar atrás los episodios de indisciplina, enfocarse en el trabajo y alinearse a las exigencias de Guede para encarar la próxima campaña con mayor profesionalismo.
Con un mensaje de orden, rigor y responsabilidad, Pablo Guede busca instaurar una cultura interna que priorice el rendimiento deportivo por encima de cualquier distracción externa. En La Victoria entienden que el desafío no solo será futbolístico, sino también de conducta y cohesión, claves para volver a ser protagonistas en el ámbito nacional e internacional.



