Todas las organizaciones que responden a una estructura social de derechos y deberes, deben hoy más que nunca organizarse con más compromisos entorno a una plataforma sindical que haga de representativa, orientativa y defensa frente a toda situación contradictoria de injusticia e imposiciones.
El magisterio nacional con la representación de sus docentes es testigo de esto a través de su sindicato que inicialmente fue el SUTEP que se presentó como el abanderado de las luchas, protestas y defensa, luego en el andar de los años esta supuesta bandera de lucha y defensa no se vio materializada en la masa magisterial, situación ésta que le sembraron el escenario propicio para que nazca el FENATEP.
Esta organización está reconocida por el Ministerio de Trabajo, es el nuevo sindicato de los maestros, en torno al cual giran no solo docentes activos, sino también cesantes y administrativos al mismo tiempo, por quienes, el FENATEP debe dar muestras permanentes de representación y defensa, de lo contrario, podría convertirse con el tiempo como un SUTEP que hoy está totalmente desplazado del escenario de la representación magisterial.
Hago hincapié esto por las confusiones que siempre se presentan en el contexto precisamente de las buenas intenciones de los sute base de cada institución educativa de haber inicialmente la buena voluntad de reactivarse cada sute institucional y estar al día en sus cuotas sindicales de descuento esta vez directamente a través del SUTE-SAM, que viene hacer el órgano provincial y los SUTE de las demás provincias son parte del SITER-Regional que a su vez los SITER de todas las regiones del país lo conforma el FENATEP.
Independientemente que el jefe de Estado que es el profesor Pedro Castillo (uno de los fundadores de esta organización), cumpla o no sus 5 años en el cargo como jefe de Estado, esta organización que agrupa a todas las masas magisteriales regionales del país, y que tiene sus respectivo ROUS reconocida por el Ministerio de Trabajo, debe ya quedar en la historia peruana como la organización magisterial que hace y vive la educación en el país y que defiende a sus agremiados docentes independientemente de todo tinte político.
En consecuencia, los docentes activos de la FENATEP están facultados de llenar el formato de descuento por parte del SUTE-SAM y su respectiva desafiliación del SUTEP, para que los descuentos sindicales ya no figuren en esta organización, sino en el FENATEP a través de sus órganos de representación, en caso de la Provincia de Tarapoto, a través del SUTE-SAM.
POSTURAS QUE INICIALMENTE FUERON RADICALES DE PRONTO CAMBIARON
En correspondencia a esto, el 22 de abril con la presencia de un grupo de congresistas del bloque magisterial, explicaron que el 100% de la CTS ya es una realidad, que inicialmente será en tres armadas, a partir del 2024, le corresponderá al docente que cese a partir de ese año hacia arriba, el 100% de su CTS por cada año trabajado.
Desde ya una gran conquista por la fuerza que le pusieron y le vienen poniendo estos congresistas del bloque magisterial, lo que nunca se dio en la historia de los maestros del Perú que siempre fue el sector más vapuleado y mentido por candidatos y gobernantes hipócritas que usaron a la masa magisterial como su gran trampolín para llegar al poder.
En cuanto al tema de la DERRAMA, los congresistas del bloque magisterial cuando eran candidatos tenían un discurso bastante radical y sancionador sobre esta institución, ahora, uno de los congresistas, indicó que esta institución no debe desaparecer, pero sí debe cambiar en cuanto a su estructura organizativa con la participación de docentes que se conviertan algo así como fiscalizadores y que deben ser al mismo tiempo elegidos no en base a delegados como siempre lo hicieron, sino a través del sistema “un maestro, un voto”.
Asimismo, según dijeron, el docente podría retirar su dinero de esta institución cualquier momento, no únicamente cuando cesa, como es hasta ahora.
¿Pasó algo para que las posiciones iniciales que fueron radicales, hoy están bastante blandos y condescendientes? Precisamente estas posiciones camaleónicas le hacen perder credibilidad al político y de estas actitudes nada consecuentes de los políticos, pensamos que se podría salir y evitar.
La realidad, muchas veces lo dice que no es así. Y el único que sigue pagando las consecuencias y posturas fluctuantes y negativas, son los ciudadanos, en este caso, los únicos que siguen pagando son los maestros.