ALERTA QUE DEBERÁ SER TOMADA EN CUENTA
Las herramientas tecnológicas que permiten analizar imágenes satelitales, dan cuenta que en el sector El Quinillal de la provincia de Picota, se viene afectando por la deforestación, ya que existen extractores furtivos que están extrayendo madera para convertirlos en carbón que son vendidos en los centros de abastos de Tarapoto y en otras provincias. Sin embargo, para los ambientalistas la falta de presencia de las autoridades debería ser tomada en cuenta para las acciones inmediatas.
Según plataforma en línea Global Forest Watch (GFW) en la provincia de Picota se registraron 273,251 alertas de deforestación entre el 6 de marzo del 2021 y el seis de setiembre del 2022, de las cuales 49 por ciento fueron alertas de alta confianza detectadas por un solo sistema y 38 por ciento fueron alertas detectadas por múltiples sistemas que buscan la inmediata intervención de las autoridades.
Desde el año 2001 hasta 2021, la provincia de Picota perdió 33 mil hectáreas de bosque primario húmedo, lo que representa 62 por ciento de su total, en el mismo periodo de tiempo. El área total de bosque primario húmedo en Picota disminuyó en 31 por ciento en este periodo de tiempo. Mediante Google Earth pro se puede observar como está avanzando la deforestación en el sector Quinillal.
Esta situación preocupa a los ambientalistas de la zona, tal es el caso del coordinador de los Ecoguerreros Iván Rojas García, quien manifiesta que, de seguir esta situación, en cinco años será difícil recuperar ese bosque, donde los extractores furtivos están aprovechando la ausencia de las autoridades por falta de personal y recursos para combatir la deforestación. “Vamos a sufrir problemas graves de agua y producción de alimentos. Debemos tener una política regional ambiental de manera urgente y los actuales candidatos al gobierno regional tienen que tener en cuenta esto” puntualizó. (Hugo Anteparra)