Tarapoto como provincia, debería además gastar presupuestos en mejorar las infraestructuras turísticas que tiene. Por ejemplo, con apenas 30 mil nuevos soles y el trabajo de la Asociación Para Conservación de Tiroyacu, en medio de la Cordillera Escalera, podría culminarse el proyecto de cuatro fuentes de aguas termales en la comunidad de San José y generar un nuevo complejo turístico, pues muy cerca se encuentran las cascadas de Choroyacu. Con ello, se podría evitar, como ha sucedido con la Asociación de Conservacioón Alto Ahuashiyacu, que los posesionarios de la zona sigan deforestando. Cuesta muy poco, pero soluciona muchos problemas.
EMAPA San Martín, al modelo de la EPS de Moyobamba, podría financiar proyectos de esta naturaleza, incrementando apenas un nuevo sol en los recibos de los contribuyentes, en lugar que, como sucede ahora, sigan obstaculizando la labor de conservación, como en el caso de la Asociación Para Conservación Flora y Fauna.
En lo que se refiere al desagüe, no hay peor obstáculo que hacer de los ríos letrinas públicas. Ese problema debe solucionarse lo más rápido posible. En lugar de seguir pensando en sembrar cemento, que el nuevo alcalde, tenga como prioridad resolver los problemas que no se resuelven hasta el presente.