Mariano Castro Sánchez-Moreno
Director Unidos por Bosques
Fundación para la Conservación y Desarrollo Sostenible
El diario “Voces” alertó en su primera plana y en sus siguientes páginas sobre una preocupante amenaza a las áreas naturales protegidas del país y de la región.
Justificada alerta que exige, a su vez, que los congresistas y demás autoridades fijen su posición. Pues el perjuicio del patrimonio natural y, especialmente, de los diversos ecosistemas afecta directamente a las opciones que las personas y la sociedad aprovechamos para satisfacer necesidades básicas, tales como la alimentación, la provisión de agua o para impulsar actividades económicas sostenibles.
La alerta mencionada se refiere a un proyecto de ley de un sector del gobierno nacional, encabezado por el MINEM y PeruPetro que pretende desnaturalizar la ley de áreas naturales protegidas. Este proyecto busca subordinar el destino del último refugio de la biodiversidad peruana que se encuentra en las áreas naturales protegidas, a los propósitos y decisiones del MINEM, poniendo en grave riesgo la conservación de los ecosistemas de las áreas naturales protegidas, ANPS, y, sobre todo, desconociendo la política sobre las ANPS, la que desde sus inicios hace ya más de 60 años, es una de las pocas políticas de Estado más consistentes y que ha venido siendo fortalecida y mejorada.
Estamos pues ante un proyecto de ley que, también, vulnera el mandato constitucional que el Estado debe promover la conservación de la biodiversidad, claramente establecido en el art. 68º de la Constitución Política del Perú. además, este proyecto de ley vulnera el “Acuerdo de Promoción Comercial Perú Estados Unidos”, aprobado mediante Resolución Legislativa nº 28766, en cuyo art. 18. 3º se establece que es “inapropiado promover el comercio o la inversión mediante el debilitamiento o reducción de las protecciones contempladas en sus respectivas legislaciones ambientales”.
Con esta proyecto de ley, el Ministerio de Energía y Minas, MINEM, y PeruPetro se ubican muy lejos de proponer políticas o normas que impulsen el mejoramiento de las políticas públicas y prácticas empresariales en el sector de hidrocarburos; peor aún, estarían causando un grave retroceso respecto a los estándares efectivos de protección ambiental, de conservación de biodiversidad y de los ecosistemas de cuyo bienestar dependen las personas que están dentro o en el entorno de las Areas Naturales Protegidas.
Además, con este proyecto de ley el MINEM también pretende desnaturalizar los mecanismos para determinar los ámbitos y condiciones de creación y protección de las áreas naturales protegidas y sus instrumentos de planeamiento, tales como los Planes Maestros y el Plan Director. Afectando a los Parques Nacionales, Santuarios Nacionales y los Santuarios Históricos, así como las áreas naturales de uso directo como las Reservas Nacionales, Reservas Paisajísticas, Refugios de Vida Silvestre, Reservas Comunales, Bosques de Protección, Cotos de Caza y Áreas de Conservación Regionales.
Por todas estas consideraciones el Gobierno Nacional y el Congreso de la República deberían confirmar la inviabilidad del mencionado proyecto de ley, la que también ha sido comunicada por el MINAM en reciente opinión técnica.