Nuestro mayor capital para la vida y desarrollo de nuestros pueblos es su capital natural y allí tenemos que poner nuestra atención y acción, allí pongamos todos nuestros recursos económicos y nuestras capacidades profesionales.
Por: Segundo Vicente Calle
Qué pasa con nuestros congresistas, que nos pasa a los sanmartinenses, a los amazónicos, parece que no somos insensibles, ver a nuestros ríos con escaso caudal de agua, convertidos en basurales y desagües, ¿no nos dice la ola de calor? ¿Es que acaso no somos conscientes que todo esto es producto de la deforestación descontrolada?
Que contradictorio que siendo el Perú el segundo país con mayor territorio amazónico, con gran parte de la biodiversidad global y lugar de supervivencia de pueblos originarios, al parecer los congresistas -más lamentable es que los son de la amazonia- y para peor aún para nosotros es que los congresistas de nuestra región San Martín se hayan puesto de espaldas y hayan cerrado los ojos, por no decir todos los sentidos al momento de debatir, aprobando esta norma nefasta, más aún teniendo en cuenta uno de los indicadores que agudiza nuestra preocupación, es lo señalado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), cuando dice “la Amazonía pierde más de 150 mil hectáreas de bosque, el equivalente a 210 mil canchas de fútbol”. O que desde 2002 hasta 2022 San Martín perdió 37.6 ha de bosque primario húmedo, lo que representa 57% de su total como pérdida de cobertura de bosques en el mismo periodo de tiempo. El área total de bosque primario húmedo en San Martín disminuyó en 11% en este periodo de tiempo”
Y en ese sentido, lo que más agudiza nuestras preocupaciones, a los sanmartinenses al ver aprobado una norma contradictoria para frenar la deforestación y, que por el contrario la va agudizar de manera letal en todas nuestras poblaciones amazónicas, para los bosques y fauna silvestre teniendo en cuenta el caso específico referido a la región San Martín que es lo señalado en el informe presentado la semana pasada en Tarapoto en el Colegio de Ingenieros sobre deforestación (2022). La región habría perdido 14 329 hectáreas (Entre las provincias más afectadas figuran Bellavista (3413 hectáreas: 23.8 %), Huallaga (2158 hectáreas: 15.1 %), Mariscal Cáceres (1674 hectáreas: 11.7 %) y Lamas (1605 hectáreas: 11.3 %).
Los expertos nos dicen que la deforestación de la amazonia es de 20% y que cuando llegue a 25% la amazonia va colapsar…ah otros dicen que la deforestación ya es mucho más de lo que dicen los estudios de los científicos porque éstos no están teniendo en cuenta los cultivos y los pueblos o la deforestación o destrucción boscosa por desastres naturales.
Sin duda, el estrés hídrico, año a año se va agudizando y como consecuencia de la deforestación y agudizadas por actividades ilícitas como la minería ilegal, tráfico de tierras, narcotráfico, tala ilegal afectando la salud humana, animal y la agricultura. nos preguntamos ¿quiénes son los responsables? sin duda, los gobiernos (central, regional y local), pero también los ciudadanos de a pie. y ahora nuestros representantes en el congreso nos dan la estocada final…. esperemos se pueda hacer algo desde la movilización ciudadana (colectivos ciudadanos, cámaras de comercio, colegios profesionales, universidades, entidades técnicas como el IIAP, INIA, frentes de defensa, juntas de regantes. Para revertir estas amenazas, urge fortalecer nuestra legislación sobre la materia, no debilitarlas; implantar o ejecutar los planes y herramientas técnicas como la ZZE, planes de gestión de recursos hídricos. se requiere avanzar en la producción limpia, el ecoturismo, la siembra y cosecha de agua, manejo de bosques primarios, forestación y reforestación, masificar de manera obligatoria los sistemas agroforestales y silvopastoriles, tecnificación del riego, es decir, avanzar en la “cultura verde».
Habrá alguien en la región San Martín que dude de la importancia de los bosques para la vida de sus habitantes, en una región donde el setenta por ciento del territorio tiene vocación para la protección y conservación y, que por lo tanto son la fuente principal donde se genera el agua. Alguien se imagina vivir sin agua, se imagina un día, un mes, un año sin agua.
En un momento histórico para la humanidad y para nuestro país, donde se anuncia y, ya se está viviendo la crisis alimentaria, derivada por escasez de fertilizantes, Pandemias, guerras, cambio climático agravando la crisis por el agua, por la escasez y estrés hídrico que pone en riesgo la seguridad hídrica en consecuencia pone en riesgo la seguridad alimentaria de nuestro país. Tengamos en cuenta todos: autoridades, empresarios, académicos, dirigentes y pobladores, que nuestros bosques y los ecosistemas son el nacimiento y mantenimiento de extraordinaria biodiversidad, del agua que consumimos y utilizamos en nuestras vidas, en nuestros hogares, en nuestras comunidades, en nuestros campos y ciudades para las diversas actividades económicas.
Nuestro mayor capital para la vida y desarrollo de nuestros pueblos es su capital natural y allí tenemos que poner nuestra atención y acción, allí pongamos todos nuestros recursos económicos y nuestras capacidades profesionales.