Los tres imputados que alegan inocencia afrontarán el proceso en libertad y en 30 días se conocerá el resultado de la prueba de absorción atómica.
Después de pasar tres días detenidos bajo sospecha de estar implicados en el atentado contra el gobernador regional de San Martín, Walter Grundel Jiménez, Adriano Fernández Torres, Augusto Isuiza Isuiza y Chester Alexander Reto Rufino fueron puestos en libertad ayer al mediodía. La decisión se tomó debido a la falta de pruebas contundentes que los incriminaran.
El coronel Tito Guevara Tafur, jefe de la División de Investigación Criminal de Tarapoto, anunció que, por disposición del representante del Ministerio Público, se ordenó la liberación de los sospechosos, quienes seguirán siendo investigados, pero en calidad de citados para futuras audiencias.
Durante el periodo de detención, los tres imputados fueron sometidos a pruebas de absorción atómica, cuyos resultados serán revelados en 30 días. Además, se está analizando una escopeta que fue encontrada cerca a la casa de uno de los detenidos, para determinar si fue utilizada en el atentado.
Este caso ha generado gran controversia en la región, especialmente después de que el atentado recibiera cobertura nacional. Las autoridades continúan comprometidas en esclarecer los hechos y encontrar a los verdaderos responsables de ese acto violento, ocurrido el pasado sábado en el distrito de Pucacaca, provincia de Picota.
Mientras tanto, al salir de la sede de la DIVINCRI, los imputados se reunieron con sus familiares y compartieron conmovedores abrazos en medio de escenas de alegría. Adriano Fernández manifestó que siempre confió en la justicia y se comprometió a colaborar para esclarecer los hechos, Mientras tanto el gobernador regional no se pronuncia hasta el momento. (Hugo Anteparra)