El caso del niño que vive encadenado en una iglesia evangélica de La Banda de Shilcayo, generó preocupación y la solidaridad de la población, el finde semana una pareja de empresarios se constituyó al lugar para indagar por la salud del menor y entregar alimentado.
Hasta la Iglesia Evangélica Misionera Pentecostés Peña Horeb, llegaron los empresarios Fredy Armas y Cecilia Sandoval, quienes se conmovieron con el caso del niño Dany, que desde hace dos año padece de alteraciones y su familia cree que está poseído por un espíritu endemoniado, razón por el cual los médicos no dan con el mal.
Los empresarios entregaron colchones y alimentos a Rosa Panduro Saurin, responsable de la iglesia evangélica, quien agradeció el noble gesto de los esposos, que además donaron dinero a la madre del niño, para que compre vitaminas, ya que Dany necesita alimentación para recuperarse.
A pesar que un sector de la población cuestiona este tipo de práctica para tener encadenado al niño, su madre Deisith Tapullima Sangama, manifiesta que su hijo se viene restableciendo con las oraciones que le brindan en esa iglesia de La Banda de Shilcayo y desde hace cinco días comenzó a comer y a conversar con ellos, sin embargo temen que si lo sueltan vuelva a escaparse por varios días, tal como ocurrió anteriormente.
“Las personas que están delicadas de salud, les invitamos a que nos visiten, solo les prometemos darles mucha oración para que se recuperen y no tiene costo alguno, la labor de Dios no puede ser comercializada”, indicó la pastora Rosa Panduro Saurin. (Hugo Anteparra)