Han pasado las fiestas de San Juan y las patronales de Cacatachi y Shapaja y nos hemos dado cuenta que la carencia de espacios públicos ha llegado a un nivel de gravedad y que a las autoridades locales no les interesa en absoluto, lo que no es sino una irresponsabilidad. Sin embargo, van autorizando que las tierras agrícolas se cambien de uso para que se urbanicen y, están apareciendo urbanizaciones por doquier. En el sector Mayopampa, y por la carretera a Lamas, se anuncian la venta de lotes para viviendas en una cosa de locos. ¿Las autoridades carecen de visión, o se hacen los tontos?
Las autoridades locales del Bajo Mayo, tal vez por incapacidad, o por no tener gente adecuada que los acompañe, han abdicado sus roles para no pensar en un Gran Parque Central. Conozco la historia y sé que si a partir de ahora les “nace” la idea, lo van a cambiar de nombre para que no aparezca como mi iniciativa. (Los conozco ´pendejeretes´). El único funcionario que me invitó a conversar seriamente sobre el proyecto del parque es el licenciado Mauro Trigozo Paredes. El Proyecto Especial Huallaga Central y Bajo Mayo, a donde derivaron mi propuesta, tendría una posición clara sobre el tema, por lo que le pido a mis lectores un poquito de paciencia y todo parece indicar que creo vamos a tener parque (y espero que no nos ninguneen).
Emilio Castre Cárdenas (Lamas, 07.06.1948) es un conocido ciudadano y muy afanoso en el tema del deporte. Mis conversaciones con él versan sobre el fútbol de esas bellas épocas de Magner Ruíz Sajamí (“Ña Pancha”, que mandaba unos cañonazos que le hacía temblar a Víctor Quiñe, célebre arquero del Cali Afa), Enrique Paredes Fasanando (Ñata), Waldemar Oliveira, Carlos Vidaurre García (el Charles Aznavour del fútbol), José Benito Ushiñahua Vela, entre muchos.
En su trabajo “El fútbol en fotos- Patrimonio del Pueblo”, Emilio Castre Cárdenas recrea la historia del fútbol tarapotino entre los años de 1955 y 2014. Vemos también los retratos de los históricos Velarde Lozano, Linder García Santillán (a quien, cuando corría como venado por la punta izquierda, no le alcanzaban ni en moto), Luis Yalta, Manuel Tello, Carlos Paima, Paquito Vásquez García, Marcelino Ramírez, Jaime “Pinocho” Gómez, Raúl “Churo” Pinedo, Ruller Ríos, Manuel Alfaro y al mismísimo Emilio Castre. Y me sorprende encontrar a Abiud Saavedra y Manuel Celis, de quienes creí que no pateaban ni sapo.
Emilio sigue en su empeño de escribir una gran obra sobre el fútbol tarapotino, donde el mejor referente quizá sea Carlos Trauco Saavedra, quien acaba de destacar en la selección peruana de fútbol que participó en la Copa Centenario y que concluyó ayer domingo en los Estados Unidos. Y ahí está Emilio, a quien siempre le encuentro cabezón y “turbacho” buscando auspicios y soñando con el fútbol, sudando fútbol y viviendo fútbol.
Adolfo Orlando Lavi Maldonado, (Picota, 17.09.1939) acaba de fallecer en esta ciudad. Maestro y futbolista, fue un ciudadano a carta cabal por su humildad, sencillez y don de gentes. Como jugador del Belén, de Moyobamba, y del Cali-AFA, de Tarapoto, siempre será recordado por sus extraordinarias condiciones deportivas, donde también demostró su gran caballerosidad. Don Adolfo Orlando se desempeñaba también como técnico en electrodomésticos y en muchísimas oportunidades me brindó sus servicios. Le dedicaré una crónica especial.