– El Gobernador y doña Lucinda Vásquez se han vuelto patas del alma, ambos vienen gestionando ante las más altas esferas del poder, un presupuesto adicional para el pago de la deuda a los maestros. Meses atrás, doña Lucinda no le quería ver ni en pintura a don Víctor Noriega y solo basta leer sus declaraciones en los periódicos.
-Se puede ver a la asesora Aurora Torrejón, posar en las redes sociales, junto a la consejera amazónica, Norith Grández. Los políticos deberían evitar estas fotos que están demás y chambear por el objetivo. Mientras tanto, los maestros, sobre todo los de las zonas rurales, no están ni enterados de estos temas y siguen ganando sus mismos sueldos de hace años y nunca salen en las listas para estos beneficios que les adeudan. Dicen que a la consejera Grández ya le pagaron.
– Y en Moyobamba se desató un escándalo en la municipalidad, porque una comisión del órgano de control hizo un arqueo inopinado y encontró un faltante en las arcas, pero que después apareció. El alcalde Oswaldo Jiménez puso el grito en el cielo y denunció una intromisión en su gestión, al mismo tiempo respaldó a sus funcionarios. Horas más tarde, se conoció que en el área de tesorería prestaban plata a sola firma. Un caos, donde tienen que irse los responsables.
– Una de las encargadas manifestó que hizo un préstamo al comunicador, Lino Gordillo, por la suma de 500 soles y firmó un recibo simple y que después, según ella misma, devolvió. Y nadie le cree por supuesto. Este comunicador está escondido y es no habido, porque tiene una orden de captura por otro caso. ¿Qué está pasando en la municipalidad de Moyobamba? Y las regidoras regias no dicen nada.
– El exadministrador del PEAM, Luis Cépeda Aranda, renunció a su cargo, porque según el mismo, no le dejaron trabajar dentro del marco de la ley y que en esa institución hacen lo que les da la gana. Dijo en una carta que repartió a algunos medios de comunicación, que el sindicato de trabajadores, que solo agrupa a unas 20 personas, maneja hasta una caja chica y que los procesos de licitación estarían siendo direccionados y entre líneas, se puede leer que el responsable de todo este desorden es el mismo gerente general. Duras palabras de quién ha sido fundador de este proyecto especial, que según el propio Cépeda, está de cabeza.
– Bueno, para nadie es un secreto lo que ocurre en el PEAM. No nos olvidemos que en esta institución, en los años maravillosos de los amazónicos, se perdían motos, herramientas, computadoras y todas las semanas habían escándalos de corrupción y nunca pasó nada. Muchos de los trabajadores honestos, dicen ahora, que nada ha cambiado, que ahora las cosas están peores y que todos, incluido los dirigentes sindicales, están coludidos y solo les importa sus temas personales. En el PEAM se necesita una reorganización hace ratos y una fumigación especial.
– Y el ingeniero Becerra, gerente general del PEAM sigue con su chamba política, que es meter floro a la gente y continuar con las visitas al hospital de Moyobamba para anunciar que ya falta poco para que se termine, de convocar a conferencias de prensa para anunciar que el centro cultural se iniciará este año, que las obras y los presupuestos ya están aprobados y hace la finta, y habla, y dice que en San Martín deberíamos estar felices con la marca y que todo está bacán. Es el único que cumple su labor a la perfección, por eso el Gobernador le tiene mucho cariño.
– Y hasta que habló el vicepresidente regional, Rotlant Reátegui. Dijo que los periodistas no informan bien, que son irresponsables y que causan mucho daño a la gestión y a la región, que no consultan sus fuentes, que no averiguan bien lo que pasa, que no investigan, que sueltan informaciones falsas. Bien el señor Reátegui, dando unas clases magistrales de periodismo. Habría que comunicarle que no se necesita investigar mucho para darnos cuenta que hay caos en el sector Salud y en Educación.