La semana que pasó, como consecuencia de un artículo que publiqué en el diario VOCES me llamó el gerente municipal, CPC. César Augusto Hidalgo Castro, para conversar temas sobre la ciudad y donde discutimos muchas valiosas ideas. Bueno, que el gerente me haya llamado ya es un buen indicador, lo que significa que el primer funcionario de la comuna lee los diarios y se informa. Porque funcionario que no lee y se desvincula de los problemas de su ciudad, mejor es que lo manden de vacaciones y no retorne. Y con el gerente y otros funcionarios coordinamos sobre aspectos de la ciudad que se ven diariamente y que no tiene otro propósito que hacer de Tarapoto una ciudad diferente.
Los Wiwaneros Ancestrales tuvimos un invitado en la reunión del viernes pasado, y nos referimos al abogado Juan del Águila Cabrera, quien sería en 1986 el primer registrador público de Tarapoto, después de la protesta de Tarapoto en contra del centralismo moyobambino. y nos contó del interés en este proceso del diputado Rafael Linares Bensimón. La primera oficina registral en Tarapoto funcionó en un ambiente que cedió la Municipalidad de San Martín cuando era alcalde don Salomón Yengle Rodríguez.
La historia de la creación de los registros en Tarapoto está contada con detalle en la revista El Tarapotino, que dirigía Julio Alberto Quevedo Chávez. Y es el resultado de un proceso cuando Tarapoto se levanta en contra del centralismo moyobambino, en una de las protestas cívicas
que forman que alcanzó participación regional al sumarse las otras provincias. Para mediar en este difícil momento el gobierno tuvo que enviar a Armando Villanueva del Campo, entonces senador y ministro, y en el grupo vino el ingeniero Alberto Fujimori, en su condición de presidente de la Asamblea Nacional de Rectores, porque los reclamos incluían la demanda de una universidad. Como también se vio el problema de los precios del arroz y del maíz, fui parte del equipo técnico, conjuntamente con el ingeniero Wilfredo Torres Sifuentes, para presentar una propuesta a la comisión de alto nivel.
En el fragor del paro tarapotino, y que ya era regional, repito, contra Moyobamba, se produjo una bronca verbal de tremendas dimensiones entre Armando Villanueva del Campo y el juanjuiano Geno Ruíz Reátegui, quien sería diputado en el periodo 1990-1992. Fue una polémica fuerte, pero de buen nivel, que radio Tropical difundiría en vivo y tendría una audiencia espectacular. Bien por el ingeniero Geno Ruíz, quien dejó a salvo el buen nivel de los políticos sanmartinenses de otros tiempos. Sí, de esos tiempos.
En ese año de 1986, Rita Gardini García, reconocida lideresa, se sumó con fervor a la lucha por Tarapoto. Llamó a las mujeres con esta frase: “¡¿Dónde están las mujeres tarapotinas que no se suman a la lucha?!” Ella venía de ser la primera alcaldesa de Tarapoto y una referente imprescindible de la historia de nuestra ciudad. (Comunicando Bosque y Cultura).