Merece respiración profunda de aires renovados al saber que las personas en el mundo están tomando decisiones reales para mitigar los factores adversos perjudiciales del medio ambiente. La voz en el desierto está siendo escuchada. No es para menos. El incremento de la temperatura en la tierra es tanto que algunos pavimentos públicos están siendo empleados como cocina para la preparación de alimentos.
Que inmensas montañas de nieve de las nevadas y de los polos se están derritiendo como chupete al medio día en la selva tropical. Por supuesto, que los hermosos nevados que cubrían las cimas de esas inmensas montañas, no solo apaciguaban las temperaturas elevadas que provienen del centro de la tierra, sino también, con el jugueteo de los cambios de temperaturas de los días y las noches, estas minas de riquezas de hielo, iban dando gota a gota agua a las fuentes que discurrían por sinuosos cauces como el río Huallaga, que viene desde Pasco, por el hermoso pueblo de Huariaca, donde el río Huallaga tiene el ancho de una modesta quebrada de aguas cristalinas. ¿Qué pasará con la ausencia de estos inmensos hielos? ¿Qué pasará si todas las orillas de las fuentes de agua están peladas, sin árboles? Simplemente el río Huallaga se secará y se convertirá en una fábula, en un cuento de que el tiempo pasado fue mejor. No habrá agua. Las fajas marginales mantienen con agua al riachuelo, a la quebrada, al rio, a la laguna, al ojo de agua. Si no hay hielo que origine el río, si no hay fajas marginales que mantengas estas aguas, no existe otra alternativa que esperar lo peor: Observar nosotros mismos o nuestras siguientes generaciones, las últimas gotas que discurren por estos cauces rellenados de limo y arcilla; ser ingratos testigos de verificar la desaparición de los animales que poblaban estas fuentes.
Hace algunos días, en Francia ocurrió una reunión de alrededor doscientos representantes de países.
Una cumbre esperada desde hace muchísimo tiempo. El tema del medio ambiente tenía que tratarse YA. Sin ánimos depresivos, hasta se podría afirmar que el desarrollo del evento es tardío. No se planificó ni se realizó en su oportunidad.
“Francia ha sido designada país anfitrión de la XXI Conferencia de las Partes (COP21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) con el principal objetivo de llegar a un nuevo acuerdo internacional sobre el clima previsto para después de 2020. La Conferencia es anual y se celebra por turnos en un país de los cinco grupos regionales de la Organización de las Naciones Unidas: Asia-Pacífico, Europa del Este, Latinoamérica-Caribe, Europa Occidental y otros países y África.
Polonia fue el país anfitrión en 2013, Venezuela en la reunión previa en 2014 y Perú fue para la Conferencia de las Partes en 2014. En 2015, Francia ha sido la elegida para presidir la Conferencia sobre el Clima. Francia ha iniciado su transición ecológica y energética con el objetivo de reducir sensiblemente sus emisiones de carbono. Sus emisiones de gases de efecto invernadero por habitante ya figuran entre las más bajas de los países desarrollados”.
En Perú aún existen muestras de insensibilidad y hasta inoperancia por este tema. ¿Cómo se puede permitir que miles de hectáreas de selva se destruyan por el oro ilegal en Madre de Dios? ¿Cómo se pueden permitir que millones de hectáreas de suelos se pierdan por la aplicación de malas prácticas agrícolas en la selva? ¿Cómo se explica la extinción de cientos y miles de especies naturales de la selva, en nuestras propias narices y ante nuestras cómplices miradas huecas? ¿Cómo se pueden permitir que los aires de las urbes se carguen de anhídrido carbónico y de ruidos por demás estruendosos de motores sin tubos de escape? ¿Qué se espera para no frenar de una vez estas intolerancias? Existe la esperanza que con esta XXI Conferencia de las Partes (COP21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) realizada en Francia, las autoridades con poder de decisión se hayan sensibilizado y por eso se respiran aires renovados para el medio ambiente mundial.