Juanjuí. El anuncio de la paralización indefinida que ha programado la provincia de Mariscal Cáceres, a través de su Frente de Defensa, desde este lunes 22 de agosto, exigiendo que se le haga justicia con la urgente ejecución de obras vitales para su desarrollo y bienestar; han preocupado al gobernador regional de San Martín y a algunos congresistas sanmartinenses que, de inmediato, buscaron reunirse con el ministro de Transportes y Comunicaciones, Martín Vizcarra.
En la nota de prensa oficial del gobierno regional que se difundió el martes, se habla que el referido ministro Vizcarra, muy al estilo de sus antecesores, anunció plazos y fechas como ya se ha hecho costumbre, sobre la probable licitación de la obra del asfaltado del tramo que falta en la vía Fernando Belaúnde Terry tramo Campanilla – Pizana.
El Ministró de Transportes dijo que a fines de agosto, se realizará la licitación pública para la carretera Campanilla – Pizana, con un monto de inversión de 454 millones de soles. ¿Pero quién garantiza que eso se cumpla? dicen los dirigentes del frente y la ciudadanía.
Además, que el 1 de setiembre, se deberá otorgar la buena pro de la obra del puente vehicular Santa Lucía, valorizado en un millón 800 mil soles. Pero no expresó nada sobre el puente Tarata sobre el río Huallaga que tiene un costo de más de 60 millones de soles, hecho que preocupa sobremanera a la población mariscalense.
La población interpreta esta movida comunicacional de las autoridades de la región haciéndole el coro al anuncio del ministro Martín Vizcarra, como una estrategia para apaciguar la contenida agitación social que se ha despertado en la población de Mariscal Cáceres que hace tiempo ha venido señalando esta especie de complot contra la zona sur sanmartinense en sus reclamos más importantes.
Las tantas “mecidas” al pueblo de Juanjuí y la desagradable experiencia de las promesas de “plazos y fechas” sobre la ejecución del tramo de la carretera FBT Campanilla-Pizana, del Hospital EsSalud Juanjui y del Puente Tarata, que hicieron ministros en su momento y que nunca se cumplieron, ha alimentado esa sensación de excepticismo colectivo, pues ya nadie cree en la palabra de los funcionarios centrales porque no supieron honrarla, ni tampoco tienen la seguridad de lo que dicen respecto a la solución de su problemática se hará realidad; por más que lo diga un confiable ministro de Transportes como lo es el expresidente regional de Moquegua.
La población, en resumen, espera acciones concretas, no mesas de diálogos ni anuncios que después se olvidan y que cualquier compromiso con esta población que hagan los funcionarios del gobierno central se haga en Juanjuí y no en Tarapoto como ha sucedido siempre ignorando y ninguneando a las demás provincias, especialmente del sur de nuestro departamento.
Así las cosas, parece que nadie va a detener el paro anunciado para la próxima semana en esta ciudad. (Colaboración: Carlo Augusto Pérez Pérez)