Personal de la Contraloría General de la República se constituyó ayer en el Hospital Nacional Guillermo Almenara para evaluar las denuncias vinculadas a la aparente negligencia médica en perjuicio de la joven Shirley Meléndez Tuesta, quien sufrió la amputación de manos y pies pese a que fue a atenderse por cálculos renales.
La Contraloría empieza una auditoría en la que evaluará al Servicio de Urología y al Departamento de Imágenes del nosocomio, que brindaron atención a la joven de 25 años”, indicó el contralor Edgar Alarcón Tejada.
Alarcón Tejada manifestó que las acciones de control de este organismo no buscan entorpecer los procesos de inversión, sino que, más bien, intentan evitar que se incurra en alguna irregularidad