¿Asamblea Constituyente? En estas circunstancias NO
Por: Segundo Calle Castillo.
La crisis social y política nefasta en la que vivimos se profundizada desde el 2016 con la victoria de Pedro Pablo Kuczynski, la contendora perdedora Keiko llena de odio a la par con sequito oscuro atizaron la polarización con sus seguidores y aliados convertidos en cancerberos sumado al aporte de sectores progresistas desubicados están conduciendo al país a la crisis social y económica más grande.
Luego, vino la pandemia y la decadencia de ciertos personajes ligados al gobierno e involucrados en tráfico de vacunas, oxígeno y hospitales colapsados, desnudó nuestra realidad como estado y como personas, en medio del dolor y muerte, fue un durísimo golpe, superamos los 200.000 muertos a causa de la pandemia y hemos llegado a ubicarnos en el penoso primer lugar en cuanto a la tasa de mortalidad a nivel mundial, duro golpe que aún se profundiza en las comunidades campesinas alto andinas y pueblos originarios de la selva, que han dejado marcado sus garras.
Según estudiosos de la historia peruana y latino americana, la crisis que atravesamos es tan fuerte que ha sido comparada con la crisis que padeció el Perú después de la guerra con Chile, haciendo renacer y visibilizar la postergación, desigualdad, racismo histórico creando conductas de odio, resentimiento y venganza. En ese tenue escenario ha sido provocado por la clase política hace décadas, en ese “lado oscuro” hemos transitado.
Tenemos al ejecutivo y legislativo enfrentados, lejos de buscar salida a la crisis mediante el dialogo han desatado una lucha de vida o muerte para sobrevivir protegiendo y defendiendo sus intereses particulares; en una clara demostración que no les interesa trabajar de verdad por la población y sus necesidades.
Al paso de los años, Fujimori, Toledo, Alan, PPK, Vizcarra, Merino: la misma calaña
A Merino se lo trajo abajo la prensa tradicional, así como existe una clase política tradicional centralista existe la prensa tradicional, monopólica, una clase de políticos caviares y liberales a ultranza, comodines que azuzaron y aprovecharon las marchas “espontaneas” ahí quedó grabado en la memoria de sus padres y familiares los nombres de Inty y Brayan.
Políticamente existen espacios ciegos, donde la legalidad es letra muerta, o en todo caso dependiendo “quien sea el intérprete”; como una minoría que no habían votado por la vacancia de Vizcarra y pusieron a Sagasti como presidente del Congreso y de allí como presidente del Perú, hizo un gobierno de “transición”, pero si muy expeditivo para firmar el contrato para la explotación de la más grande reserva de Litio ubicado en Puno.
El pueblo está lleno de desconfianza donde reina la incertidumbre e inestabilidad, divido entre los que viven aprovechado y manipulado su proximidad al poder con el gobierno de turno, y los del Perú profundo olvidados, ninguneados postergados sin salud, educación. Unos invisibilizan y otros utilizan la democracia y la libertad para elegir, teníamos que elegir entre una candidata “ciega” y corrupta, defensora del modelo económico y un maestro, sindicalista y rondero elegido como presidente de la república por un sector y jamás reconocido por la élite dominante, desde el primer día que tomo el gobierno fue ninguneado y el propio Castillo ayudó con sus torpezas al nombrar a personajes incompetentes e impresentables, el propio Castillo abrió las puertas a un congreso testarudo que se tumbo a más de 80 ministros de estado en 18 meses.
El modelo económico corrompido es la disputa de fondo
Esa mayoría que puso a Castillo en el gobierno, voto contra la corrupción, no voto por convicción, por una nueva Constitución, como nos quieren hacer creer los de PerúLibre para que los mantenga y perpetue en el gobierno y en el poder.
Es la causa de lucha y pugna en este momento crucial para el Perú como nación, es el objetivo de la coyuntura provocada, la lucha y protesta azuzada en este momento por los que veían pasmados como se desbarrancaban sus opciones políticas presentes y futuras. A pesar de las evidencias, existe alguna duda sobre quien o quienes empujaron a Castillo al vacío, los que chantajearon con los votos, porque aunque no alcanzarían los votos ese dia, la salida constitucional se iba a dar si o si, por lo dicho en la fiscalía e iba ahondar esa mañana en el Congreso por unos de los asesores y el jefe de Inteligencia de este gobierno, confirmando de manera indubitable e indefendible, que el ahora ex – presidente estaba envuelto en corruptelas y aún más siendo sindicado como cabecilla de una mafia con sus más cercanos y cómplices colaboradores. Es así que Pedro Castillo no le quedo otra que “morir para ganar” dándose un autogolpe y llamando “a la convocatoria de una Asamblea Constituyente”, para ir en consonancia con su discurso propalado en todos los espacios que tuvo, como en los consejos de ministros descentralizados y encuentros con gremios agrarios, ronderos, ganaderos, colectivos y autoridades en palacio de gobierno donde por cierto esto nunca antes había ocurrido.
¿Asamblea Constituyente? Creo que no están dadas la condiciones para una discusión, el país necesita mentes sensatas no a empujones y con la pistola en la cabeza no es el momento. Es verdad existe personajes interesados identificados que quieren es ser parte de la cúpula del gobierno y del poder y reemplazar a quien hoy circunstancialmente gobierna.
Es cierto el clamor popular es ¡que se vayan todos!,
Por ello es deber y obligación de los políticos de turno, hacerse una, dar una inmediata solución que calmen los enfrentamientos entre la población y sus autoridades.
En tal sentido, es imperativo y necesario pensar y actuar buscando fórmulas constitucionales que satisfagan los intereses sociales de la población en su conjunto y satisfacer el clamor popular “que se vayan todos”, es por ello, imprescindible que al adelanto de elecciones en debate y, a la par se hagan las Reformas Constitucionales que permita una mayor y mejor oferta electoral a través de nuevos políticos y partidos, con más y mejores representantes en la que se vea reflejado nuestras raíces, todas las sangres. Para que tenga la legitimidad y legalidad, mediante el dialogo y la concertación se hagan las reformas.