Una fuerte controversia ha surgido en torno a una reciente orden de compra emitida por la Unidad Ejecutora 400 de la Oficina de Gestión de Servicios de Salud – Bajo Mayo para la adquisición de 14 piezas de mano de baja velocidad, de la marca NSK, destinadas a las áreas de odontología. Según especialistas en el tema, el precio asignado a estos instrumentos estaría considerablemente sobrevalorado, lo que ha generado cuestionamientos dentro del sector salud.
Este medio consultó la opinión del cirujano dental Carlos Guerrero Coral, quien señaló que una pieza de mano de buena calidad puede costar alrededor de 540 soles, aunque en el mercado se pueden encontrar opciones aceptables desde 280 soles por unidad. No obstante, en la orden de compra en cuestión, se consigna un valor unitario de 3,015 soles, lo que elevaría el monto total a desembolsar hasta 42,223 soles por las 14 unidades, una cifra que muchos consideran excesiva.
El hecho ha generado malestar entre los trabajadores sindicalistas del sector Salud, quienes han expresado su preocupación por el manejo de los recursos públicos y la transparencia en los procesos de adquisición. Consideran que se trata de un posible caso de sobrevaloración que debe ser investigado con rigurosidad.
Ante esta situación, se buscó la versión del director de la OGESS Bajo Mayo, Cristian Celis Torres, quien a través del Área de Imagen Institucional informó que recién está tomando conocimiento del caso y que en los próximos días brindará una declaración oficial. No se ha precisado aún si se realizará una auditoría o investigación interna sobre este proceso de compra.
Según el documento de compra, la empresa encargada de proveer estos instrumentos es General Service M&M SAT, con dirección en el pasaje San Antonio, manzana A, lote 1, en el barrio Huaico de Tarapoto. La elección de esta empresa también ha sido objeto de observaciones, ya que no se ha detallado el procedimiento de selección ni el comparativo de precios.
Finalmente, personal del almacén ha comunicado de manera interna que los instrumentos no han ingresado aún al inventario, por lo que no han sido aceptados oficialmente. Este hecho agrega más interrogantes al proceso, ya que no se justifica la emisión de una orden de compra por un monto tan elevado, especialmente si los productos no han sido recepcionados ni verificados. Se espera que las autoridades correspondientes esclarezcan los hechos en los próximos días. Por: Hugo Anteparra