En el 2022 se reportaron 686 casos de suicidio. El 20.9 % corresponde a la población entre 15 y 29 años y el 16.6 % de 20 a 24 años
El Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef) del Ministerio de Salud (Minsa) registró 686 casos por suicidio durante el año 2022, de los cuales 463 corresponden al sexo masculino y 223 al sexo femenino. Del total, el 20.9 % corresponde a adolescentes y jóvenes entre 15 y 19 años, mientras que el 16.6 % a una población de 20 a 24 años de edad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el suicidio es un acto deliberado realizado por una persona con pleno conocimiento o expectativa de su desenlace fatal, siendo una de las 10 causas principales de carga de enfermedad en el mundo.
Es por ello que, en el marco del Día Mundial de Prevención del Suicidio, la directora de Salud Mental del Minsa, July Caballero Peralta, explica que esta situación puede prevenirse identificando tempranamente las señales de alerta y tratando oportunamente los problemas de salud mental que pudieran estar asociados, como los trastornos afectivos, el consumo de sustancias psicoactivas, entre otros.
La especialista manifiesta que una de las características más frecuentes que muestran las personas con conducta suicida son los cambios radicales en su comportamiento, la alteración en el sueño o alimentación, descuido en su apariencia personal, aislamiento de su entorno familiar y social, suelen presentar dificultad para disfrutar de las cosas que antes les agradaban, regalan posesiones preciadas y experimentan tristeza, temor, irritabilidad o enojo.
“La persona puede sentirse sola y desanimada, pesimista, que es responsable de todo lo negativo que sucede, siente que ya no tiene razones para vivir. Con frecuencia, tiene dificultad para tomar decisiones, para buscar soluciones a los problemas, para valorar las propias fortalezas, piensa constantemente en la muerte”, indicó Caballero Peralta.
Otro de los factores de riesgo a tomar en cuenta son los antecedentes familiares de suicidio, la violencia familiar y/o en el entorno social, las enfermedades crónicas, los trastornos mentales previos, así como el consumo de drogas, alcohol y el bullying.
¿CÓMO APOYARLOS?
La mejor manera de apoyar a una persona con conducta suicida es expresando un interés auténtico, brindando una escucha empática, hablándole clara y abiertamente sobre sus intenciones, aceptando sus sentimientos sin juzgarlos. Asimismo, es importante retirar los objetos con los cuales podría hacerse daño, contactarse con sus familiares y acompañarlo al establecimiento de salud más cercano para un tratamiento oportuno.
Para recibir orientación y mayor información sobre el tema pueden acercarse a cualquiera de nuestros 249 centros de salud mental comunitaria a nivel nacional o llamar a la línea gratuita 113, opción 5.