Anteayer “me topé”, con una noticia que captó mi interés, como un mensaje de la trascendencia: “REVELAN ESTRUCTURA INTERNA DE MISTERIOSO PLANETA ENANO ERIS. Eris fue descubierto en 2005 y es similar en tamaño a Plutón” (…) parece tener un interior rocoso bajo una capa de hielo (…) tiene un diámetro de unos 2.326 km, ligeramente inferior a Plutón y tiene un 25% más de masa que este. (DW)
Luego de leer esta nota, inmediatamente me puse a investigar, buscando acceder a la dimensión cosmobiológica de Eris, en su significado e influencia para la vida integral en la tierra, basándome en métodos de la epistemología de la vida (análisis de todos los factores) y de la ciencia, entendida en el sentido ilimitado del Saber, tal como lo plantean los Maestres Dr. Serge Raynaud de la Ferrière y Dr. David Juan Ferriz Olivares.
Así pues, partiendo del nombre, descubrí que ERIS es, en la mitología y teogonía griega, la diosa de la DISCORDIA y representa la envidia. Hesíodo la describe en dos aspectos: una envidia “positiva” que hace a los hombres “superarse” por competencia no quedarse atrás ante los logros de sus pares. Y el aspecto puramente negativo que es cruel y fomenta batallas.
Sin embargo, en su obra TEOGONÍA, este sabio griego escribe menos amablemente de Eris:
“Por su parte, Eris (Discordia) parió al doloroso Ponos (Trabajo), a Lete (Olvido) y a Limos (Hambre) y al lloroso Algos (Dolor), también a las Hisminas (Disputas), las Macas (Batallas), las Fonos (Matanzas), las Androctasias (Masacres), los Neikea (Odios), las Pseudologos (Mentiras), las Anfilogías (Ambigüedades), a Disnomia (el Desorden) y a Ate (la Ruina y la Insensatez), todos ellos compañeros inseparables, y a Horcos (Juramento), el que más problemas causa a los hombres de la tierra cada vez que alguno perjura voluntariamente.”
Asimismo, Homero se refiere a “Discordia” como “hermana y compañera del homicida Ares”, que penetra en las muchedumbres y acrece el afán de los guerreros, siendo, ni más ni menos, que la causante de la famosísima GUERRA DE TROYA con su celebérrima “MANZANA de la DISCORDIA” (!!) Asimismo, se la representa como una mujer con alas (símbolo del aire, es decir: los pensamientos, las ideologías, etc.)
Prestamente se nos vino a la mente el hecho de que, desde su descubrimiento, el año 2005, ha adquirido significación acentuándose todo tipo de DISCORDIAS en el mundo y en especial en el plano del AIRE (las alas de Eris) o sea la INTERNET, donde las redes sociales se han convertido en el nuevo campo de batalla sin cuartel, con expresiones como que la libertad de expresión se ha llegado a confundir con libertad de agresión.
Vemos también, desde el 2005, acentuarse la presencia de todos los nefandos hijos de ERIS: El Trabajo (en el sentido negativo de explotación laboral), el Olvido (los pueblos se olvidan rápido y por ello cometen los mismos errores) el Hambre, el Dolor, las Disputas, las Batallas, las Matanzas, las Masacres, los Odios, las Mentiras, las Ambigüedades, el Desorden, la Ruina y la Insensatez (!) Basta ver a “nuestro alrededor” mundial y tendremos miles de “ejemplos” de todos estos “hijos” de Eris.
Ello me recuerda también el carácter ESPIRITUAL de la Tercera Guerra Mundial (pues la primera Guerra fue la prueba de fuego para el CUERPO material de la humanidad, la Segunda fue la prueba de fuego para el ALMA (emociones) y la TERCERA es la prueba de fuego para el ESPÍRITU (ideas, ideologías, la simbólica “Batalla en el cielo del Arcangel Miguel contra el Dragón…” descrita en el Apocalipsis) o también la muy mencionada “Batalla Cultural” contra el nefasto globalismo y sus ideologías alienantes.
Como bien se ha descrito a esta última guerra que YA vivimos se presenta como una guerra de “todos contra todos” cada vez menos internacional pero, bajo el exterior civil, comerciante, religioso, cultural, culto, informativo, estético, ético, comunal, terrorista y criminal, profundamente individual, difusa, íntima e inaparente. Es una guerra diaria que se manifiesta a través de diferentes ámbitos y actividades muy concretas, como la educación, el cine, urbanismo, tecnologías de la comunicación, psiquiatría y psicología o relación trabajo / ocio. Pero a pesar de estos aspectos empíricos superficiales, esta guerra, hay que decirlo, es espiritual en esencia (…) se inició con las protestas y levantamientos de estudiantes estadounidenses en los campus en la década de 1960 y a nivel geopolítico y civilizatorio implica el enfrentamiento del marxismo chino y el capitalismo occidental, sus respectivas mentes y lógicas (…) la prueba de este tercer fuego, es una prueba de conversión (en el campo trascendental), reintegración (de la ciencia, el conocimiento, el saber hacer y el conocimiento del conocimiento y en el poder), la unificación (de todos los poderes y todos los campos del ser) y de comunión (en la Presencia universal del Verbo). Así que aquí están las fuerzas presentes, más precisamente los poderes que enfrenta el hombre contemporáneo. A cada uno le toca elegir su bando.