Una persona natural del asentamiento humano 10 de Agosto de Tarapoto, falleció ayer con intoxicación generalizada, luego de haber ingerido catorce sobres de un Omnilife, su familia indicó al representante del Ministerio Público, que fue una joven de 18 años de edad, quien le vendió y preparó una mezcla en polvo para que le alivie los dolores que sufría a los riñones y después de cinco minutos tuvo que ser conducido al hospital de Contingencia.
Ignacio Sangama Cumapa de 55 años de edad, tras ser atendido de emergencia en el hospital de Contingencia tuvo que ser trasladado a una clínica particular, para ser sometido a lavados gástricos, sin embargo catorce horas después falleció y los médicos nada pudieron hacer para salvarle la vida, porque la intoxicación le afectó los intestinos, y el hígado. Es por ello que sus familiares determinaron denunciar a Fiorela Córdova Pérez, una joven de 18 años de edad quien le vendió y preparó el producto.
“El médico de la clínica Trinidad confirmó que mi padre murió intoxicado, los representantes de la empresa el sábado se acercaron al hospital y nos dijeron que ellos no tienen nada que ver con este caso, nosotros vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para no quede impune. No es posible que alguien muera de esa manera cuando solo buscaba mejoría para los dolores de riñones que padecía”, indicó Jean Sangama Cumapa, hijo del fallecido.
Voces intentó conocer la versión de los representantes de Omnilife que llegaron al hospital de Contingencia para indagar sobre la salud de Ignacio Sangama, sin embargo al notar a la prensa corrieron sin dar s explicaciones. Este medio deja abierta la posibilidad de conocer la versión de los representantes de esa empresa cuando lo estimen conveniente. (Hugo Anteparra)