Para Ivan Rojas
“Durante la campaña electoral, el gobernador Walter Grundel aseguró a la ciudadanía que implementaría un sistema de garitas de control para fortalecer la seguridad y proteger el medio ambiente en la región. Sin embargo, tras varios meses de gestión, esta promesa sigue sin cumplirse, generando preocupación y consecuencias negativas para los habitantes y el ecosistema local”, señala el ambientalista.
Las garitas de control fueron planteadas como una medida esencial para evitar la entrada de delincuentes y sicarios, además de frenar actividades ilícitas como la tala ilegal, la caza furtiva y la contaminación ambiental. “Sin embargo, la falta de implementación de esta estrategia ha permitido que la violencia y la criminalidad sigan en aumento, poniendo en riesgo la seguridad de la población y el equilibrio ecológico de la región” anota.
“La ausencia de estos controles ha significado un incremento en la inseguridad y en delitos ambientales que afectan gravemente nuestra región”, señalaron representantes de organizaciones ciudadanas y ambientales. “Si la promesa del gobernador se hubiera materializado, hoy estaríamos en una situación diferente, con mayor seguridad y un entorno natural más protegido”, agrega el conocido Ecoguerrero.
Ante esta situación, la ciudadanía exige respuestas y acciones concretas por parte de la administración de Grundel. Es fundamental que se cumpla con lo prometido y se establezcan mecanismos efectivos para garantizar la seguridad y el cuidado del medio ambiente. Se espera que en los próximos días el gobierno regional brinde un pronunciamiento sobre el estado de esta promesa y las medidas que tomará para su cumplimiento. La población merece saber qué pasó con este compromiso y qué acciones se tomarán para corregir esta situación, anota Iván Rojas.