Juanjui. El Sindicato de Trabajadores de la Educación de Mariscal Cáceres (SITEMAC), se pronunció frente a lo que considera el saqueo del aguinaldo por Fiestas Patrias a más de 600 maestros de esta provincia, por cuyo agravio económico y moral, anuncia que entablará en las siguientes horas denuncia penal contra el Gobierno Regional a través de la Dirección Regional de Educación San Martín y la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Mariscal Cáceres.
El dirigente provincial del organismo sindical, Ronal Ramírez Vásquez llamó al magisterio de la provincia al que calificó de “decoroso y responsable”, a tomar con dignidad estos atropellos que son consecuencia de la lucha por una vida digna y honrada, anunciando que se están tomando las medidas legales correspondientes para salvaguardar los derechos de sus agremiados.
Asimismo, pidió no atemorizarse por las medidas represivas que anunciara el director regional de Educación Germán Villanueva Montoya y el propio director de UGEL, Alembert Cotrina Hernández como la apertura de procesos administrativos que, en el caso de nuestra región, afectará a más de cinco mil docentes en actividad.
“Los maestros de verdad, no están incluidos en la suciedad de la corrupción que ahora mancha a la clase política nacional y regional, casi sin excepción y que, por lo mismo, han perdido la capacidad de invocar dignidad para sancionar a los maestros del Perú”, expresó Ramírez Vásquez mediante un pronunciamiento hecho público en el que responsabiliza de estos excesos al primer ministro César Villanueva y al gobernador regional Víctor Noriega a quienes llamó “enemigos del magisterio nacional“.
Por su parte, fustigó la actitud antimagisterial de la Dirección Regional de Educación y Dirección UGEL Mariscal Cáceres, cuyas instancias plagadas de corrupción, castiga a los modestos trabajadores de reducidos ingresos, mientras se muestran benignos con funcionarios que, cometieron flagrantes actos de peculado y apropiación de dinero del Estado, y que a diario, cometen abusos aprovechándose de su ubicación y de la confianza depositada en sus manos para manejar los recursos.
“A estos se los premia dándoles simples sanciones y amonestaciones mientras se ensañan con el modesto maestro”, denunció. (Carlo A. Pérez)
