Para el abogado y periodista Marco Cruzalegui, con respecto al tema del allanamiento de la casa del alcalde de Moyobamba, Ronald Gárate, dijo que ahora el reto de la Fiscalía es demostrar que hubo delito en la presunta entrega de dinero de algunos trabajadores de esta municipalidad para poder seguir laborando en esta entidad.
“Tienen que demostrar que esos descuentos estaban condicionados, si eso no se demuestra no es delito”. Sin embargo, enfatiza que “ha sido el propio presidente del MUR Benjamín Haemmerli quien aceptó esos aportes. Todo este tema es un símil con lo que le sucede a la agrupación política de Keiko Fujimori, en el caso de los cócteles. Fujimori piensa que son válidos, pero la fiscalía piensa lo contrario”.
Dice Cruzalegui Chávez, que, además, “Haemmerli el presidente del MUR dijo que esos aportes no sólo son acuerdos, sino que están dentro de los estatutos del MUR. Respecto a la disconformidad mostrada por el alcalde Gárate Chumbe, con respecto a la celeridad con la que actuó la fiscalía”. Indica luego, Cruzalegui, que saludaba la rápida reacción de la fiscalía, “siempre debería de ser así, porque hay procesos que duran más de diez años”.
Lo que está diciendo la fiscalía al actuar inmediatamente es: “si piensan delinquir, deben de pensarlo dos veces antes de hacerlo”. Recalca que hay tres escenarios que se le podrían venir al alcalde Ronald Gárate, si se demuestra que todas estas denuncias son ciertas: podría haber una petición de prisión preventiva, se vaya a un juicio y se presente la moción de vacancia. Otro posible escenario, sería que el propio concejo municipal remueva al alcalde. No existe la figura que dé un paso al costado mientras duren las investigaciones”.
Sobre las agrupaciones políticas actuales, dice Cruzalegui, que todas “son vientres de alquiler, plataformas electorales”. Enfatizando que el grupo de Ronald Gárate no ha formado el MUR, ellos no han confeccionado el ideario, la filosofía, los estatutos, simplemente han utilizado a la agrupación política para llegar al poder.
En torno a la posibilidad de que se presenten colaboradores eficaces, dice el abogado, que no sólo puede salir uno, sino varios. Pueden conectarse con la fiscalía y podrían dar evidencias muy concretas como la captura de un whatsapp, en donde se diga o se discuta la contratación de un trabajador bajo esa modalidad de supuestos aportes voluntarios.
Reflexiona Cruzalegui y dice: “es una vergüenza que tengamos los moyobambinos a algunos alcaldes que han estado y están en la cárcel, con eso se evidencia que han primado los intereses personales. Por eso, ya no es un halago que una persona se postule a un cargo público. La gente honesta no quiere postularse”.
Dice luego que los problemas que ahora tiene Ronald Gárate no santifican a Ernesto Peña, porque se evidencia que todos estos problemas tienen un componente organizacional. Preguntándose ¿desde cuándo, se han estado dando estos aportes? Eso se sabrá cuando la entidad financiera muestre los estados de las cuentas del MUR. Hasta podría ser el caso que se habrían entregado esos dineros, incluso cuando Ernesto Peña ya era alcalde. (Alfonso Delgado)