Uno de los poemas más bellos que le he leído a Bob Dylan, que profetiza la caída de una civilización asquerosamente atada a prejuicios, como la que aun subsiste. A veces pienso que se han sobrepuesto a los sueños, el anhelo de los controlistas, pero hay gente con la que siempre existe la esperanza y ese soñar en algo mucho mejor para el futuro, sin violencia, sin tanta máscara sobre la realidad. Que Dylan sea Nóbel, como que da esa cosquilla. A continuación, un pequeño homenaje a este gigante maravilloso, a través de una de sus letras:
Reuníos a mi alrededor gente, por donde quiera que vaguéis, y admitid que las aguas de vuestro alrededor han crecido, y aceptad que pronto estaréis calados hasta los huesos. Si el tiempo es para vosotros algo que merece la pena conservar, entonces mejor que empecéis a nadar, u os hundiréis como una piedra, porque los tiempos están cambiando.
Vamos, escritores y críticos, que profetizáis con vuestras plumas, mantened los ojos abiertos, la oportunidad no se repetirá. Y no habléis demasiado pronto, porque la ruleta todavía está girando. Y nadie puede puede decír
quien es el designado. Porque el ahora perdedor, será el que gane después. Porque los tiempos están cambiando.
Vamos, senadores y congresistas, por favor presten atención a la llamada. No se queden en la puerta, no bloqueen la entrada. Porque el que salga herido, será el que se quedó atascado. Hay una batalla ahí fuera, y es atroz.
Pronto sacudirá vuestras ventanas, y hará vibrar vuestras paredes, porque los tiempos están cambiando.
Vamos, madres y padres de toda la tierra, y no critiquéis lo que no podéis entender. Vuestros hijos e hijas están más allá de vuestro dominio. Vuestro viejo camino está envejeciendo rápidamente. Por favor, salid del nuevo si no podeis echar una mano, porque los tiempos están cambiando La línea está trazada, la maldición lanzada.
El que ahora es lento, luego será rápido. Como el presente será luego pasado. El orden está
destiñiéndose (perdiendo intensidad) rápidamente. Y el que ahora es el primero, será después el último, porque los tiempos están cambiando