Una comisión de dirigentes del Frente Cívico de Defensa y Desarrollo de San Martín (FRECIDES) junto a moradores del distrito de Rumisapa de la provincia de Lamas, llegó hasta la quebrada Mishquiyaquillo para constatar el grave daño ecológico que se estaría registrando en la zona. Durante la visita, se evidenció una preocupante disminución del caudal, lo que afecta directamente la biodiversidad y pone en riesgo el equilibrio ambiental del ecosistema.
Según Roger Heredia Núñez, presidente del FRECIDES, los funcionarios de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) serían responsables de esta situación, debido a que habrían otorgado autorizaciones de uso de agua a diversas lotizaciones cercanas. «Estas concesiones están afectando el caudal ecológico, comprometiendo la supervivencia de especies acuáticas y la salud ambiental de la quebrada», declaró Heredia.
Ante esta problemática, se ha convocado a una asamblea pública el próximo lunes 10 de febrero, donde la población y sus representantes analizarán las acciones a tomar para frenar el deterioro del recurso hídrico. La comunidad ha manifestado su firme decisión de defender la quebrada, considerando que es un patrimonio natural vital para la región.
El impacto de esta crisis ya se siente entre varias familias, especialmente agricultores y ganaderos, quienes enfrentan la escasez de agua para el riego de cultivos y la crianza de ganado. Esta situación no solo pone en riesgo la producción local, sino también la seguridad alimentaria y el sustento diario de muchas familias de Rumisapa.
Las autoridades locales y organizaciones sociales exigen una pronta intervención de las entidades responsables, así como una revisión exhaustiva de las concesiones de agua otorgadas. La defensa de la quebrada Mishquiyaquillo se ha convertido en una causa común para la población, que lucha por preservar sus recursos naturales y garantizar un futuro sostenible para las próximas generaciones. Por: Hugo Anteparra