Por Willian Gallegos Arévalo
Mis trabajos como clasificador de tierras, perito agrario, oficial de créditos, etc., y funcionario en el sector agrario y ejecutor de consultorías me permitió recorrer el territorio y observar la destrucción de nuestros bosques, la desaparición de fuentes de agua y la pérdida de nuestra riqueza paisajística, por lo que desde el año 2003 he solicitado al gobierno regional que se declare en emergencia el sistema hidrográfico de la región San Martín, que es diferente al concepto del ´estrés hídrico´. Señor gobernador, necesitamos que usted anuncie esta decisión de impacto que obligará a todas las entidades para el trabajo de una agenda común priorizando proyectos y actividades.
Me hubiera gustado que esta iniciativa parta como una propuesta del Comité de Gestión Regional Agrario (CGRA), como espacio de coordinación intergubernamental, en donde los tres niveles de gobierno deben consensuar acuerdos para implementar las políticas públicas. Lamentablemente la no presencia de los alcaldes provinciales en este espacio –lo que ya es una omisión funcional muy grave—no ha permitido institucionalizar los procesos que permita impulsar el proceso de modernización del Estado y la descentralización de país. Es entonces donde usted debe intervenir como máximo líder regional, pues los alcaldes están en otros temas.
Es cierto que una declaratoria de emergencia debe hacerse sobre la base de evaluar la situación hidrográfica de nuestra
región, y no dudando que sus técnicos opinarán en contra de mi propuesta, ¡es allí donde entra en juego su capacidad de líder y conductor y demostrar que es usted un gestor! Una declaratoria de emergencia de nuestro sistema hidrográfico generará impacto político en todos los niveles y la declaración –que tendrá fuerza política–, generará un conjunto de acciones en todas las esferas porque a partir del agua deben generarse e implementarse las políticas vinculadas. Hay suficientes razones para ya preocuparnos por el problema del agua. Las lluvias de estos días no cuentan.
La decisión de declarar en emergencia el sistema hidrográfico llevará a salvar de la contaminación a nuestros ríos, preservar y recuperar nuestras fuentes hidrográficas dentro del concepto máximo del bien común y el bienestar general, y tendrá efectos en el turismo regional, como región verde. Tiene, por tanto, efectos totalizadores sobre la conservación de nuestros ecosistemas; y dentro de todas las acciones a implementar consideramos vital la protección de las cabeceras de cuenca y el mantenimiento de los caudales ecológicos. Usted me entiende, señor gobernador.
Cuando usted era alcalde de la provincia de San Martín le alcanzamos la propuesta de crear bosques urbanos y usted nos aclaró que era responsabilidad del gobierno regional. (Solo me permito recordarle). Mi recomendación sincera: no ponga reparos para tomar la decisión política. Dicen que usted es un hombre valiente y con coraje y que no le tiembla la mano. Si los consejeros regionales, sus altos funcionarios y asesores le digan a usted que esta idea es absurda e inviable, no dude: ellos son los enemigos. Aprendamos de la historia. (Comunicando Bosque y Cultura).