Un grupo de vecinos del distrito de Morales se está organizando con la finalidad de exigir al municipio que continúen realizando operativos contra ruidos molestos en los centros de diversiones, porque cada fin de semana la situación para ellos se vuelve insoportable por la contaminación sonora que existe desde hace mucho tiempo y solamente una discoteca fue sancionada y obligada a tener barrera de sonido.
Los sectores más afectados son la parte posterior de la discoteca Anaconda, el sector Loma Linda, cuyos vecinos vienen intentando reunirse con las autoridades municipales a fin de buscar una solución a la contaminación sonora que les viene afectando durante los fines de semana y no saben a dónde acudir para exigir los operativos que contrarresta en los ruidos molestos.
“No entendemos las razones para que algunos centros de diversiones de Morales sigan atendiendo a sus clientes con volumen alto de sus equipos de sonido, estamos desesperados y es por ello que estamos organizándonos para luchar contra la contaminación sonora. Nuestras autoridades están en la obligación de atendernos, ya que nadie puede vivir en esas condiciones”, indicó Manuel Flores Pezo, morador de ese distrito.
Como se recuerda, los vecinos del asentamiento humano Cumbaza se organizaron y exigieron la intervención de una discoteca de la zona, hoy en día regularizaron su acústica y actualmente ya no causa problemas en el vecindario.