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miércoles, diciembre 4, 2024
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Ven y disfruta el Museo Departamental de San Martín…

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A ver les cuento, hoy trataré de articular algunos párrafos de algo que ha estado llamándome la atención desde hace mucho tiempo y para ser sincero, es un tema que a muchos no nos llena de ilusiones ni de expectativas, pues les digo: debería ser todo lo contrario. Desde siempre me gustó saber de dónde venía y cual era mi procedencia, creo que eso explica el apego hacia mi abuelo y sus historias relegadas a héroes de batalla, a costumbres olvidadas y a paisajes memorables. Pero siempre quise saber más, creyendo que eso ostenta humildemente mis buenas calificaciones en el colegio en el área de Historia y Ciencias Sociales: los incas y su gran capacidad para desarrollar la agricultura, los Chavín y su extraordinaria calidad técnica para la cerámica, los Chimúes y su asombrosa forma para fundir el metal, los Chachapoyas y sus grandes y asombrosas construcciones arquitectónicas. Para resumirles, esta es mi historia, tu historia, nuestra historia, en donde todos somos parte de ella. Pero abarcar todos los rastros que nuestros antepasados nos dejaron sería un trabajo arduo, así que solo nos concentraremos en lo nuestro, en nuestra inmensa y verde región sanmartinense.
La historia

Todo se remonta hacia el tiempo de los incas, cuando Yawar Huaca (el que llora sangre), era quien gobernaba el imperio inca. Los Chancas y los Pocras al mando de Ancoallo y Astohuanca se sublevaron e hicieron temblar al imperio, situando la ciudad imperial, el Cusco. El inca sin preparar la defensa de su imperio huyó, pero su hijo Wiracocha (príncipe de los sueños), persiguió firmemente a los rebeldes, obligándolos a huir por la selva norte, pasando éstos por el puente colgante de Apurímac, cortando las sogas que unían al puente en los extremos para no ser perseguidos, llegaron hasta las orillas del río Mayo, estableciéndose en una llanura llamada “Muyupampa”, otros migraron hasta el territorio donde hoy se ubica Lamas, denominado en ese entonces por el nombre de Ancoallo. Pero la gran duda para mí, es saber, que si al llegar estos migrantes desde el imperio inca, encontraron por estas tierras diferentes grupos humanos. Los arqueólogos me cuentan que sí hubo grupos como los Chachas y los grupos que hoy se conocen como el de las culturas amazónicas (Chazuta, Picota, Tocache)

Las civilizaciones
Así pues, en medio de este espeso y tupido bosque, se fueron formando diferentes culturas y civilizaciones, entre los que destacan Los Chachapoyas y el territorio que ocupaban se extendía por un área que cubría de norte a sur unos 300 km. aproximadamente, cerca de la confluencia con el río Uctubamba, territorio lleno de huecos y cuevas, con el Marañón hasta el afluente del río Chontayacu, que limita con el Huallaga. En resumen, Los Chachapoyas ocupaban los sectores al sur del Marañón, en la zona de Bagua, del actual departamento de Amazonas, zonas orientales de San Martín y un pequeño extremo oriental del departamento de La Libertad, en donde se encontraron restos arquitectónicos y diversos objetos líticos de aparente filiación Chachapoyas, los cuales se encuentran en el Museo Departamental de San Martín, ubicado en la ciudad de Moyobamba, dentro de las inmediaciones de la Dirección de Cultura – San Martín, donde después de una explicación histórica, se pueden observar evidencias paleontológicas, fósiles en forma de conchas, huevos de tortuga y caracoles, un fardo funerario envuelto en telas, cabezas clavas, cerámicas en forma de aríbalo, vasijas y jarrones, morteros, objetos líticos de guerra como hachas para la caza y el tallado de las piedras, báculos con inscripciones sagradas, baleadoras para el uso de la defensa personal, diversas prendas textiles que datan del año 200 d.c al año 1400 d.c; objetos encontrados en su mayoría en la parte del Gran Saposoa, pertenecientes a la civilización de Los Chachapoyas, antes y después de ser conquistados por los incas.

Por eso no te quedes atrás, ven y visita, y descubre en el Museo Departamental de San Martín, la historia a la que perteneces, aquí te explicarán la procedencia de dichos objetos encontrados, el contexto histórico a los que pertenecieron y cómo, poco a poco, estos objetos han ido formando parte del Patrimonio Cultural de nuestra nación, entendiendo al museo como un espacio para compartir, para divertirse y aprender como una opción de ocio, cultura, aprendizaje y experiencia.

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