“Pagué mil dólares por esa sonrisa que ahora tiene”, “Yo le cambié la vida”, “Imagínate pasar de Lurigancho a San Isidro”, “Me fastidia que ella sea una malagradecida”, “Mis calzoncillos valen más caro que todos sus calzones juntos”, Yo soy bravo, yo soy pero bravazo”.
Sí. La farándula, la prensa amarillista y toda la basura mediática nos hace olvidar por un instante al protagonista del año, el Covid 19.
Hace unos días el pelotero Jean Deza terminó su relación con Josmery Toledo (ex policía que se vio involucrada en un escándalo por un video de tik tok). Y mientras se efectuaba la separación, los trapitos de alcoba salieron a la luz para ser tendidos en un cordel público, el mismo que ha generado que muchos saquen a relucir su estado machista y otros, su doble moral.
Algunos suelen decir “Ella se lo buscó”, “quería sus 5 minuto de fama”. “Le gusta el dinero fácil, que asuma las consecuencias”. Sí, irónicamente frente a todo esto nos es más fácil señalar con un dedo y criticar a la mujer, quien puede haber cometido errores, pero pocos son los que sancionan y reprochan al hombre, a ese bacancito que tras haberse acostado con su ex pareja, ventila todo lo que en su momento “le dio por amor”.
Soy de las mujeres que no llevo un cartel de “feminista radical” ¡No! Considero que la mujer puede ser muchas veces la que violenta, la que abandona a los hijos, la que asesina, la maldita psicópata. Sí, muchas veces, es la mujer quien se pinta de pies a cabeza de la peor manera y la actitud de todas ellas, siempre serán rechazadas por mí.
Por eso, con toda esta situación ventilada en los medios de comunicación en donde desnudan públicamente a una mujer de toda su ropa y accesorios que recibió como “regalos”, solo me queda dar un humilde consejo a todas las mujeres: ESTUDIEN, tengan la edad que tengan, porque nunca es tarde y porque es la única manera de estar completas, de realizarse, de conseguir lo que deseen, pero bajo su sacrificio. Para que cuando les dé la gana puedan viajar, comprarse lo que quieran sin necesidad que ningún Advíncula “las deje cojas de tanto sexo a cambio de dinero y placer”. Para que ningún Deza les encare de los lujos regalados, desde la carilla de los dientes hasta el cemento para la construcción de la casa de unos padres que nada de culpa tienen en el escándalo.
Una mujer puede tener lo que desee, SOLA. Sin ese auspiciador que solo busca sexo o simplemente exhibirla como si se tratará de un trofeo. Y algunos saldrán a decir “Las mujeres se apañan entre mujeres y atacan a los hombres” y a ellos les respondo: Me enseñaron que un hombre, un caballero, jamás se comporta como un cobarde restregando el dinero que ha dado a una mujer, porque ni esa mujer ni nadie le puso una pistola en la cabeza para que lo hiciera. Lo hizo por que quiso.
La mujer por años ha sufrido con el peso de los estereotipos, de ser como la sociedad quiere que sea, de agradar siempre al resto.
Si la mujer decide por sí misma, es una rebelde y jamás nadie le amará. Si bebe alcohol o fuma un cigarrillo, le dirán que una mujer hermosa no hace eso. Le dirán que una mujer debe oler a perfume y no a cerveza o cigarrillo. Pero…. ¿Quién y qué delimita la belleza? ¿Deja de ser hermosa una mujer al sujetar un cigarrillo? ¿Al beber una copa? ¿Cuál perfume la hará más bella? ¿Realmente, ella quiere ser bella?
De las mujeres más hermosas que he conocido y me han cautivado, no recuerdo su olor, pero sí su carácter, su talento y su inteligencia.
Si hay que preocuparnos por algún olor, que sea por el del respeto, la ética, el trabajo, la justicia, el amor, la tranquilidad y la vida misma, porque esas sí son las fragancias que se necesitan en las calles.
La violencia hacia la mujer está normalizada, tanto, que muchas veces, no se dan cuenta de ello.
Lamentablemente todavía existe el bacancito que dice a su pareja: “Estás fea, estás gorda, eres inútil, nadie te va a querer. Te lo digo por tu bien”. Frases que solo están cargadas de alta dosis de machismo, de maldad. Mujer, nada que te denigre es por tu bien. Eso debe quedar claro.
Saquen de sus vidas a los que se creen Jean Deza, porque son solamente basura. Y tú mujer, deja de idolatrar a Sheyla Rojas y de querer tener dinero fácil.
Ámate más, estudia, trabaja. Y si alguien te dice “Yo soy bravo”, tú respóndele: “Arranca nomas h….”