La humanidad ha sido golpeada brutalmente por un mal que no podemos ver, pero que hemos cocinado durante muchas décadas y en todo el planeta.
Los efectos de la acción del hombre sobre la naturaleza, han empezado a tener consecuencias catastróficas en todo el globo y hoy enfrentamos una pandemia que es efecto de la intervención cada vez más invasiva del hombre en los ecosistemas.
Nuestro estilo de vida en el presente, tiene un precio muy alto para quienes heredaremos la tierra. Un planeta en donde los eventos catastróficos serán cotidianos, ello si es que no tomamos decisiones cruciales en el presente, para el futuro.
El Gobierno Regional de San Martín, viene construyendo una estrategia y plan de inversiones para promover el desarrollo rural bajo en emisiones en la región San Martín de cara a los retos que hoy se nos presentan.
En este contexto, la deforestación representa uno de los principales retos qué atacar en la región San Martín. De acuerdo a Geobosques, en el año 2000, el 74% de nuestro territorio era bosque, lo que equivale a casi 4 millones de hectáreas, el 20% correspondía a no bosque y el 1% a aguas, mientras que el 5% no llegaba a ser monitoreado.
Del 2001 al 2018, la deforestación en la región San Martín ha sido muy variable, no obstante, en los últimos años ha existido una evidente disminución de las áreas degradadas, llegando al 2017 a 12501 hectáreas deforestadas, pero elevándose nuevamente el 2018 hasta llegar a 21376. En ese sentido, se ha analizado el comportamiento de la deforestación, de los distritos de Awajún en el Alto Mayo, El Porvenir en la provincia de San Martín, Shamboyacu en la provincia de Picota y Uchiza en el Alto Huallaga.
Quedando en evidencia, que muchos actores se encuentran involucrados, como agricultores, empresarios, organizaciones, industrias, concesionarios forestales, además del gobierno en sus instancias nacional, regional y local. Si bien es cierto , las principales causas directas del problema, están relacionadas a la expansión de las actividades agropecuarias, asentamientos humanos, y apertura de vías de comunicación, y por otro lado, las causas indirectas que desencadenan la deforestación (y a las que hay que prestar mucha atención), se han identificado a la corrupción, los programas de inversión pública y privada, déficit en los ingresos y el capital, las invasiones, además de un deficiente control y vigilancia.
A ello se suman brechas y desafíos en el territorio, como la pobreza y aún más la pobreza extrema, que en determinados lugares de San Martín alcanza hasta el 29.2%, la accesibilidad del territorio, el bajo rendimiento de los cultivos, además de la alta desnutrición que en algunas provincias alcanza hasta el 50%.
Problemas complejos que además requieren de respuestas complejas que van por mejorar las cadenas de valor, enfoques multisectoriales, además de una intervención diferenciada en el territorio.
Con la finalidad de dirigir esos esfuerzos es que nace la estrategia de Desarrollo Rural Bajo en Emisiones, implementada a partir de la Resolución Ejecutiva Regional 150-2019-GRSM, que es un instrumento de gestión territorial que describe la política pública regional para reducir la deforestación y la estrategia necesaria para alcanzar los objetivos de política propuestos. La Estrategia Regional de Desarrollo Rural Bajo en Emisiones, en su componente de política pública regional, propone el cambio o transformación esperada (¿qué quiero conseguir?) en una región o departamento para reducir la deforestación; en su componente de estrategia, describe la ruta más eficiente para alcanzar los objetivos de política propuestos (¿cómo voy a conseguir el cambio esperado?) indicando a las instituciones públicas o privadas que deben estar vinculadas y los insumos necesarios para alcanzarlos.
En esta política, se persigue que al año 2030, la región San Martín logre un desarrollo sostenible, incrementando sus índices de productividad y competitividad a través de la producción de bienes y servicios bajos en emisiones.
Para ello, se han trazado tres objetivos:
La producción sostenible de bienes y servicios para el incremento de la competitividad regional.
Gestión sostenible de los bosques amazónicos, adoptando medidas frente al cambio climático
Bienestar comunitario sostenible.
Todo ello, para disminuir la pérdida de cobertura de bosques amazónicos en el departamento de San Martín, mientras se incrementa la productividad e ingresos de la gente, mejorando su calidad de vida.
Para conocer más en detalle esta estrategia, ingrese al siguiente link: http://www.regionsanmartin.gob.pe/Erdrbe