Prefecto visita comisarias para conocer la real situación de los puestos policiales.
En Perú el alto grado de inseguridad generado por la violencia y la delincuencia, obstaculizan el crecimiento económico y la reducción de la pobreza. Sin embargo, en San Martín tenemos cifras desactualizadas que no coinciden con la realidad, la falta de datos precisos impide formular en forma adecuada el problema. Aunque no existen estudios concluyentes al respecto, se estima que sólo el 25% de los actos delictivos son denunciados, pero vayamos a lo que pasa en estos días en nuestra región, tratemos de entender, NO para alarmar, sirva la reflexión para enmendar, corregir como parte de un colectivo social.
El aumento de robos, celulares, de motocicletas, de asaltos a mano armada, el asesinato a un cambista y la micromercializacion de estupefacientes va en aumento sin que la autoridad haga cumplir la ley.
Tibiez y actitud timorata como la de “cuidar a los barristas en sus desplazamientos por las calles de la ciudad”, existen registros de los desplazamientos de estos jovenzuelos, entre varones y mujeres que de forma organizada se atreven a cerrar calles para sus desplazamientos, con “motocicletas hechizas que sirven como liebres” obstruyen esquinas, – se cubren entre ellos- es decir toman el control de la ciudad cuando les viene en gana y resguardados por un grupo de policías “dice” para evitar desmanes. Mientras que el vecino, el parde o la madre de famila sólo atina a cerrar sus puertas atrapados por el pánico.
El asesinato a un cambista de moneda extranjera, el crimen nos muestra sus lado más cruel y tenebroso sin que a la fecha no se tenga una versión oficial de la autoridad sobre este asesinato. La vida arrancada de un balazo cobarde a un hombre trabajo, nos pone ante un reto que la ciudadanía de forma organizada con la autoridad se tiene que corregir.
La División de Investigación del Crimen en San Martin, necesita un cambio de actitud y aptitud en todos los niveles.
En San Martin la policía en sus 10 provincias tiene ubicado en su mapa del delito los llamados “puntos calientes” y el ministerio público parece que también.
Para nadie es un secreto las actividades ilícitas en Nueva Cajamarca camuflados en centros nocturnos y prostíbulos, para nadie es un secreto “las movidas” en los llamados centros de recreación y discotecas en Morales y la historia se repite en La Banda de Shilcayo, Juanjuí, Bellavista y Tocache.
En San Martin tenemos una escuela de policía, -que no se abastece es cierto-, pero tampoco disculpa; al menos el nivel salarial de un efectivo recién salido de la escuela cubre sus expectativas económicas, comparado con otras actividades en la actividad pública o privada -sin que sea este motivo o justificación- de su inercia.
Urge empadronamiento de Comités de Mototaxistas
No existe un registro de los comités de mototaxis, un empadronamiento real, siendo esto una responsabilidad compartida con los alcaldes, comités de seguridad ciudadana, no es nada extraño ver transitar motos y mototaxis sin placa de rodaje en pleno centro de la ciudad y paraderos informales, con calles tomadas sin que el poblador pueda ni siquiera pedir orden por temor a verse expuesto a represalias.
Hace unos meses el General de Macro Región Policial convoco en la plaza de armas de Tarapoto a Comités Vecinales y Rondas Campesinas, según dijeron para ayudar en la lucha contra el crimen, luego de esta exhibición los Comités y Ronderos ¿Recibieron alguna capacitación? ¿Han realizado alguna operación en conjunto? ¿El ministerio público, se ha manifestado?
En este escenario, nada favorable, lo cierto es que no existe una política capaz de articular, de accionar inter-institucional en todos los niveles, alcaldes, ministerio público-jueces y fiscales con decisión y verdadero apego a la legalidad.
En las últimas semanas, por ejemplo, se han dado ciertas detenciones, ejemplo un sujeto que fue detenido en flagrante delito calificado como hurto agravado arrebato a 3 personas; fue puesto en libertad, es decir ¿Fue puesto en libertad para que continue delinquiendo y robando?
El robo y el delito sigue imparable en tanto ¿Qué papel cumple la Fiscalía? ¿interviene?,¿denuncia?, ¿aplica la ley? ¿ejerce sus funciones como defensor de la legalidad y como titular de la acción penal? Como es sabido está obligado a intervenir de oficio, al tomar conocimiento, por cualquier medio de la comisión de un hecho delictivo.
Somos testigos cómo la policía interviene lugares donde venden productos robados -Tarapoto tiene “su cachina” compradores ilegales camuflados de talleres del delito, se detiene a los receptadores, son puestos a disposición de la fiscalía y a las horas son puestos en libertad, ¿Podrán explicar cómo funciona el marco legal en estos casos? En los últimos meses ¿se ha realizado un operativo para constatar y tomar acciones sobre a la situación legal de los extranjeros en la región?
Es así es como percibimos, lamentablemente Tarapoto NO es una ciudad segura contra todos los indicadores del INEI.
¿Adónde vamos?
El otro lado del problema es la incapacidad institucional para hacer frente a esta realidad. Es un hecho que la policía peruana se encuentra sumida en una profunda crisis de manera tal que bien podría formar parte del problema, dado que algunos efectivos que se hallan comprometidos en actos delictivos. “Detienen a integrantes de organización criminal liderada por una general mafia policial lucraba con implementos de bioseguridad en plena pandemia mientras policías fallecían” daba cuenta la semana pasada un medio nacional. Asimismo, las otras instituciones públicas que guardan relación con la seguridad pública, como son el Poder Judicial y el sistema penitenciario, también procesan sus propias crisis y resultan inadecuados para las circunstancias actuales que presenta el país.