Siempre he dicho que Lima es una ciudad caótica donde te puedes pasar hasta cuatro horas en una combi, y en la que tienes que andar con dos ojos al frente y dos a la espalda. Una urbe gigantesca donde es difícil encontrar parques públicos decentes, y donde la necesidad de un gran bosque urbano, como el Central Park de Nueva York es urgente y necesaria para dar un poco de calidad de vida a sus habitantes.
Las propias experiencias de sus habitantes confirman en muchos casos lo que plasma Sebastián Salazar Bondy en su famoso libro, “Lima la horrible”, o en la famosa frase de Alexander Von Humboldt: “Lima está más alejada del Perú que Londres”.
En nuestra última visita a Lima, con mi padre y mi hijo, quisimos dejar un poco los grandes centros comerciales y ver esa Lima antigua y olvidada por sus habitantes. Fuimos por la Alameda de los Descalzos y el Paseo de Aguas, en el Rímac, los cuales fueron mandados a construir por el virrey Amat para que su amante, la Perricholi, diera sus paseos diarios. Bellísimo lugar.
Un taxista, que resultó ser un ilustrado historiador, nos llevó al lugar donde vivió “Tatán”, el famoso delincuente ´faite´ de los años 50, en los Barrios Altos. Afuera de la quinta en la que vivía se puede ver una tremenda pintura en su honor, siempre con su elegante terno. Luego pasamos por el famoso barrio de Malambo, en el Rímac, que actualmente es la actual Avenida Francisco Pizarro. De este barrio eran
Carita y Tirifilo, dos temibles delincuentes, uno negro y el otro mulato, que se retan a muerte y que son los personajes principales de la gran obra “Duelo de caballeros”, de Ciro Alegría.
Y para finalizar, al día siguiente, fuimos a la gran Fortaleza del Real Felipe, en El Callao. Una extraordinaria historia del último reducto español en Sudamérica, del siglo XIX, que terminó de manera dramática y trágica en 1826, cuando los realistas se rinden ante los patriotas, al convencerse que no recibirían refuerzos de España.
Debo reconocer que si bien antes escuché de estos sitios, nunca me nació el ir a visitarlos. Para muchos de nosotros Lima solo nos sirve de escala para luego ir a otra ciudad del país, más “turística”. Craso error, ya que Lima con sus miserias y dramas alberga una rica historia que merece ser más conocida. Una historia de héroes gloriosos de nuestro pasado y también de héroes anónimos de nuestra actualidad que luchan día a día por sacar adelante a este sufrido país. (Comunicando Bosque y Cultura).